12.05.2017 Views

Valerie Tasso. Diario de una ninfómana

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

¿Cómo se pue<strong>de</strong> ser tan cínico? Tengo que aguantarme para no <strong>de</strong>svelarle dón<strong>de</strong><br />

me encuentro.<br />

—¿Dón<strong>de</strong> estás? —le pregunto <strong>de</strong>strozada.<br />

—Este fin <strong>de</strong> semana estoy con mi madre, en Barcelona.<br />

No le digo dón<strong>de</strong> estoy yo. Él no sospecha para nada que me pueda encontrar en<br />

Madrid con Carolina. Nos <strong>de</strong>spedimos y Carolina me comenta:<br />

—¿Ves cómo miente? Está <strong>de</strong> camino hacia el bar.<br />

Su móvil se pone ahora a vibrar. Me mira sorprendida, y compren<strong>de</strong>mos que es<br />

Jaime nuevamente.<br />

—De acuerdo —dice ella—. Te espero en diez minutos.<br />

Y cuelga. Le acaba <strong>de</strong> <strong>de</strong>cir que está saliendo <strong>de</strong>l metro, a punto <strong>de</strong> llegar a su<br />

cita. Nos volvemos a mirar, sin po<strong>de</strong>r creernos que un hombre pueda tener tanta<br />

cara.<br />

No sé <strong>de</strong> dón<strong>de</strong> saco las fuerzas para aparecer veinte minutos más tar<strong>de</strong> en el<br />

bar. Estoy dividida entre las ganas <strong>de</strong> irme corriendo, o quedarme y explicarle que<br />

ya he <strong>de</strong>scubierto qué tipo <strong>de</strong> persona es en realidad. Por otra parte, sigo<br />

enamorada <strong>de</strong> él, pero le quiero dar <strong>una</strong> lección por todo el mal que me ha hecho,<br />

y que le está haciendo a Carolina.<br />

Aparezco como <strong>una</strong> muerta viviente, y Jaime está tan sorprendido <strong>de</strong> verme allí<br />

que necesita unos minutos para reaccionar. Yo me siento fatal, con la extraña<br />

sensación <strong>de</strong> entrar sin permiso en la intimidad <strong>de</strong> <strong>una</strong> pareja <strong>de</strong>sconocida.<br />

Carolina me acerca <strong>una</strong> silla y, acto seguido, le pregunta a Jaime si sabe quién<br />

soy yo. Él no pue<strong>de</strong> ni contestar. Se ha puesto ver<strong>de</strong>, por primera vez en la vida le<br />

han «ganado», quitándole la máscara. Intenta levantarse en varias ocasiones,<br />

como para escapar <strong>de</strong> ese triángulo, pero yo le obligo a sentarse tirándole<br />

fuertemente <strong>de</strong> la manga. La gente <strong>de</strong>l bar está observando, entre el estupor y la<br />

diversión, el culebrón que estamos protagonizando, pero nadie se atreve a<br />

intervenir. Al final, Jaime consigue irse corriendo, y Carolina me propone que vaya<br />

a su casa, que se encuentra en <strong>una</strong> famosa urbanización resi<strong>de</strong>ncial a unos veinte<br />

kilómetros <strong>de</strong> Madrid. Quiere enseñarme dón<strong>de</strong> vive y me propone incluso pasar<br />

la noche en su casa, ya que Jaime no va a atreverse a volver.<br />

Acepto su invitación, a pesar <strong>de</strong> sentirme como <strong>una</strong> intrusa, pensando que<br />

seguramente Carolina me necesita para no sentirse sola. Parece que se ha<br />

www.LeerLibrosOnline.net

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!