12.05.2017 Views

Valerie Tasso. Diario de una ninfómana

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

20 <strong>de</strong> septiembre <strong>de</strong> 1999<br />

Empiezo a sentirme cada vez mejor en la casa. Las chicas me han aceptado ya<br />

casi todas, a excepción <strong>de</strong> Isa, que sigue poniendo mala cara a cualquiera.<br />

A<strong>de</strong>más <strong>de</strong>l ambiente cada vez más tranquilo entre nosotras, yo empiezo a tener<br />

unos cuantos clientes regulares.<br />

Estoy contenta y ya ha <strong>de</strong>saparecido el nerviosismo <strong>de</strong> los primeros días.<br />

Me siento a gusto con mi cuerpo y, sobre todo, con mi cabeza. No es un trabajo<br />

más difícil que otro, la verdad. Es distinto, nada más. Ahora, pasadas las<br />

tempesta<strong>de</strong>s <strong>de</strong>l principio, se está instalando <strong>una</strong> rutina que me permite disfrutar<br />

<strong>de</strong> cada encuentro y vivir mi sexualidad liberada lo mejor que puedo.<br />

Des<strong>de</strong> el episodio <strong>de</strong> la Barbie, David sólo quiere verme a mí. Bueno, eso es lo<br />

que dice.<br />

Pero sé que llama a otras agencias y ve a otras chicas. Porque le gusta el sexo, y<br />

yo conozco las reglas <strong>de</strong>l juego. Dos veces a la semana conmigo, no pue<strong>de</strong>n<br />

bastarle. Disfruto mucho con él, aunque no es mi tipo <strong>de</strong> hombre.<br />

También he conseguido a otro cliente. Al principio, yo no era quien <strong>de</strong>bía verle,<br />

sino otra chica. Se llama Pedro.<br />

21 <strong>de</strong> septiembre <strong>de</strong> 1999<br />

Estoy con un americano en el hotel Princesa Sofía, cuando me llama Angelika<br />

para <strong>de</strong>cirme que, <strong>una</strong> vez acabado el servicio, tengo que coger un taxi para ir a<br />

un hotel situado a las afueras <strong>de</strong> Barcelona. Antes que a mi ha mandado a Gina,<br />

<strong>una</strong> rubia que trabaja <strong>de</strong> vez en cuando para la casa para pagarse el Merce<strong>de</strong>s<br />

que se acaba <strong>de</strong> comprar pero, al llegar allí, el cliente en cuestión resultó ser... ¡su<br />

jefe! Toda <strong>una</strong> historia... Gina se ha ido corriendo, se ha subido al flamante<br />

Merce<strong>de</strong>s y, a ciento ochenta kilómetros por hora, ha vuelto a la casa<br />

traumatizada. Por suerte, el cliente no la ha reconocido porque no había luz en el<br />

pasillo cuando le abrió la puerta, y no se ha dado cuenta. Pero el pobre hombre<br />

ahora está frustrado y espera impaciente a otra chica.<br />

Cuando encuentro a Pedro, me parece <strong>de</strong> entrada un tipo muy nervioso, casi<br />

neurótico y con el pelo caído. Me he mostrado muy tranquila y le he gustado<br />

enseguida. Dicen que los polos opuestos siempre se atraen. Es verdad para él,<br />

pero no para mí. Vive en un hotel cinco días a la semana, cerca <strong>de</strong> la empresa<br />

www.LeerLibrosOnline.net

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!