18.02.2018 Views

Afortunada - Alice Sebold

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

creyeran.<br />

El padre Breuninger se marchó por<br />

fin. Tuve que abrazarlo. Olía a loción<br />

para después del afeitado y a las bolas<br />

de naftalina del armario de la iglesia<br />

donde colgaba sus vestimentas. Era un<br />

hombre limpio y bienintencionado.<br />

Estaba pasando su propia crisis, pero<br />

entonces no había manera, a través de<br />

Dios o de lo que fuera, de que yo<br />

estuviera con él.<br />

Luego vinieron las ancianas. Las<br />

maravillosas, cariñosas y sabias<br />

ancianas.<br />

Cada vez que venía una me<br />

llevaban al salón y me hacían sentar en<br />

el preciado orejero de mis padres.<br />

Aquella butaca me ofrecía una

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!