TEC-17

13.
A las 72 horas, si no se
encontraron bacterias,
se libera la leche y ya
está lista para servir de
alimento a los bebés.
820
MIL VIDAS
INFANTILES
SE SALVARÍAN
CADA AÑO SI
TODOS LOS
NIÑOS FUERAN
AMAMANTADOS,
DICE LA OMS.
MOTIVOS QUE SE DAN
PARA NO AMAMANTAR
Mujeres de 12 a 49 años, madres
de niños menores de 24 meses.
No tuve leche 37.4 %
Madre enferma 13.7
El bebé no quiso 11.4
No me gustó 6.6
Madre toma medicamento 5.4
Bebé enfermo 5.3
Bebé adoptado 3.4
Bebé prematuro 3.1
Problema físico (pezón, labio bebé) 2.3
Bebé intolerante a leche materna 1.9
Amamantar es demasiado incoveniente 1.7
Quise conserver mi figura 1.6
Por trabajar 1.3
La fórmula es mejor 1.1
FUENTE: MÉXICO, ENSANUT 2012
blicado en la revista PLoS One en 2017
indica que un recién nacido debería
ser amamantado por su madre lo antes
posible, pues los bebés que inician
la lactancia de dos a 23 horas después
del nacimiento tienen un riesgo 33 %
mayor de mortalidad neonatal, que
quienes inician antes de cumplir una
hora de nacidos. Sin embargo, los que
bebieron leche materna 24 horas después
de nacimiento presentaron un
riesgo 2.19 veces mayor de mortalidad
neonatal. En México, sólo 30 a 50 % de
los niños son puestos al seno en la primera
hora de vida, según la Encuesta
Nacional de Salud y
Nutrición 2012.
Se sabe que los
menores de un año
de edad que no son
amamantados experimentan
mayores
riesgos de enfermedad
y muerte que quienes
reciben lactancia
materna, los cuales se
relacionan con enfermedades
infecciosas
pediátricas, como diarrea
aguda, infecciones
respiratorias, otitis media y enterocolitis
necrosante, así como mayor riesgo a
padecer enfermedades crónicas como
obesidad y diabetes, un cociente reducido
de inteligencia y un mayor riesgo
de epilepsia durante la edad adulta,
señala el libro Lactancia materna en
México, publicado en 2016.
Es por eso que la lactancia materna
se considera una de las estrategias más
costo-efectivas para prevenir mortalidad
infantil a corto plazo, aunque su
efecto protector se extiende a etapas
posteriores. “Hay clara evidencia para
enfermedades crónicas como dermatitis,
asma, exceso de peso, diabetes
tipos 1 y 2 y leucemia; y por otro lado
está el efecto promotor del capital humano
a través de un mejor desarrollo y
mayores logros en la educación formal
e ingreso en la etapa adulta”, se puede
leer en el texto.
“La leche materna es un líquido
increíble que, a través de años de
evolución, se ha desarrollado para hacer
bebés sanos, particularmente su
sistema inmune”, expresa Grace Aldrovandi,
autora principal de un estudio
publicado en JAMA Pediatrics en 2017.
Ella encontró que 30 % de las bacterias
intestinales del bebé parece provenir
de la leche de la madre y otro 10 % puede
rastrearse en la piel alrededor del
pezón de la madre.
Si la madre está enojada
o asustada no debe dar
de lactar.
El estrés o miedo puede
aletargar el flujo de leche,
pero es una respuesta
temporal del organismo.
MAYO / JUNIO 2018
TEC REVIEW
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