Un personaje de mi barrio
Colección de crónicas del Cabildo Nacional de la Crónica de la Ciudad de México. María Elena Solórzano Carbajal (Compiladora), Jaime A. Valverde Arciniega (Presidente), José A. Carbajal Cortés, Hugo Arturo Cardoso Vargas, Ana María Castro Velasco, Héctor Castañón Basaldúa, Manuel Garcés Jiménez, Verónica Müller, Jaime Orozco Barbosa, Marisol Reséndiz Pizarro, Miguel Ángel Salgado Meyer, Antonio Sevilla Tapia, Arturo Villanueva Bazán, Juan Rafael Zimbrón Romero y Edith Padilla Zimbrón. México, 2019.
Colección de crónicas del Cabildo Nacional de la Crónica de la Ciudad de México. María Elena Solórzano Carbajal (Compiladora), Jaime A. Valverde Arciniega (Presidente), José A. Carbajal Cortés, Hugo Arturo Cardoso Vargas, Ana María Castro Velasco, Héctor Castañón Basaldúa, Manuel Garcés Jiménez, Verónica Müller, Jaime Orozco Barbosa, Marisol Reséndiz Pizarro, Miguel Ángel Salgado Meyer, Antonio Sevilla Tapia, Arturo Villanueva Bazán, Juan Rafael Zimbrón Romero y Edith Padilla Zimbrón. México, 2019.
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La huachicrónica
interpretado por la “Banda Renovación”, de Culiacán Sinaloa:
“Ya le cantamos a narcos, ya le cantamos al jefe y ahora vengo a
cantarle a todita esta gente, que se la rifa bonito, chingando a
Pemex, pariente…lo dijo mi general allá por el 38, Pemex es de
los mexicanos, entonces es de nosotros, de que se lo chinguen los
gringos, mejor chingamos nosotros…”, canta en el clímax de su
interpretación. Y por si no hubiera quedado claro sostiene a favor
del robo a la nación: “Buen negocio el que agarraron, si en el
peligro les gusta andar, haciendo hoyos como los topos, bajo los
ranchos y la ciudad, huachicoleros, así les llaman a donde van”.
Los vídeos no se quedan atrás, como el que produjeron en
Tehuacán, Puebla los Reyes Klan, también con decenas de miles
de reproducciones: Un hombre baja de su camioneta con varios
bidones y coloca un letrero: “Se vende huachicol frío o crudo”,
mientras se aprecian largas filas de presuntos compradores.
Ya anunciada desde 2017 la venida del dios Huachicóyotl,
como siguiendo un guión, viene la tragedia, el terror en
Tlahuelilpan, Hidalgo, el 18 de enero estallan ductos de Pemex
que eran ordeñados por los huachicoleros, causando la muerte de
al menos 135 personas, lo que deja en la orfandad a cerca de 200
niños que perdieron a sus padres que acudieron por combustible
robado; pero nadie entiende, ocho días después ahí cerca, en
Munitépec de Madero, Hidalgo, las autoridades acudieron a
sofocar otra fuga de combustible causada por los ladrones
huachicoleros. Y ni por la tragedia se bajaron de las redes sociales
las cumbias, los corridos o los videos que reverencian a los
seguidores de Huachicóyotl. La muerte en México, tan bien puede
significar el máximo momento de la fama de los que se pasan de
vivos. Si a unos les toca sufrir, a otros les toca reír, reza la
sabiduría popular.
Fue antes del terror de Tlahuelilpan, Hidalgo, que
arqueólogos urbanos mexicanos descubrieron los restos del dios
Huachicóyotl, el dios de la gasolina en horas de la tarde del día 8
de enero de 2019. Según dijeron, existen diferencias sustantivas
con relación al descubrimiento de esta deidad, respecto al de otras
deidades o personajes relevantísimos, como con la “Adornada de
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