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Dios nos Cuida (1991) - Ellen G. White Writings

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El acto de fe, 10 de junio<br />

Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se<br />

ve. Hebreos 11:1.<br />

La fe no es la base de nuestra salvación, pero es la gran bendición: el ojo<br />

que ve, el oído que oye, los pies que corren, la mano que aferra. Es el medio, no<br />

el fin. Si Cristo dio su vida para salvar a los pecadores, ¿por qué no habré yo de<br />

recibir esa bendición? Mi fe la aferra, y así mi fe es la certeza de las cosas que<br />

se esperan, la convicción de lo que no se ve. Así confiando y creyendo, tengo<br />

paz para con <strong>Dios</strong> por el Señor Jesucristo.<br />

La fe, la fe salvadora... es el acto del alma por el cual el ser entero es<br />

entregado a la custodia y la dirección de Jesucristo. El mora en Cristo y Cristo<br />

mora en el alma por la fe suprema. El creyente confía su alma y su cuerpo a<br />

<strong>Dios</strong>, y puede decir con certeza: Cristo puede guardar lo que yo le he confiado<br />

para aquel día. Todos los que hagan esto serán salvados para vida eterna. Habrá<br />

una seguridad de que el alma está lavada en la sangre de Cristo y vestida de su<br />

justicia, y es preciosa a la vista de Jesús.<br />

Recuerde que el ejercicio de la fe es el único medio de preservarla. Si usted<br />

se queda sentado siempre en una misma posición, sin moverse, sus músculos<br />

perderán su fuerza y sus miembros la capacidad de moverse. Lo mismo ocurre<br />

en cuanto a su experiencia religiosa. Debe tener fe en las promesas de <strong>Dios</strong>...<br />

La fe se perfeccionará en el ejercicio y en la actividad.<br />

Es de la mayor importancia el que rodeemos al alma con la atmósfera de<br />

la fe. Cada día estamos decidiendo nuestro destino eterno en armonía con<br />

la atmósfera que rodea al alma. Somos individualmente responsables por la<br />

influencia que ejercemos, y nuestras palabras y acciones producirán resultados<br />

que no vemos.<br />

Si <strong>Dios</strong> estaba dispuesto a salvar a Sodoma por amor a diez justos que<br />

vivieran en ella, ¿cuál no sería la influencia benéfica que podría ejercerse como<br />

resultado de la fidelidad del pueblo de <strong>Dios</strong>, si cada uno que profesa el nombre<br />

de Cristo estuviera igualmente vestido con su justicia? * [171]<br />

* Año bíblico: Job 25-28.<br />

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