28.02.2013 Views

Dios nos Cuida (1991) - Ellen G. White Writings

Dios nos Cuida (1991) - Ellen G. White Writings

Dios nos Cuida (1991) - Ellen G. White Writings

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

[188]<br />

Nuestras obligaciones hacia los pobres, 27 de junio<br />

Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de<br />

beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis;<br />

enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Mateo 25:35-36.<br />

Aunque el mundo necesita simpatía, aunque necesita las oraciones y la<br />

ayuda del pueblo de <strong>Dios</strong>, aunque necesita ver a Cristo en la vida de los que<br />

le siguen, los hijos de <strong>Dios</strong> necesitan igualmente oportunidades que atraigan<br />

sus simpatías, hagan eficaces sus oraciones y desarrollen en ellos un carácter<br />

semejante al Modelo divino.<br />

Para proporcionar estas oportunidades, <strong>Dios</strong> colocó entre <strong>nos</strong>otros a los<br />

pobres, los infortunados, los enfermos y los dolientes. Son el legado de Cristo<br />

a su iglesia, y han de ser cuidados como él los cuidaría. De esta manera, <strong>Dios</strong><br />

elimina la escoria y purifica el oro, dándo<strong>nos</strong> la cultura del corazón y del carácter<br />

que necesitamos.<br />

El Señor podría llevar a cabo su obra sin nuestra cooperación. No depende de<br />

nuestro dinero, nuestro tiempo, nuestro trabajo. Pero la iglesia es muy preciosa a<br />

su vista. Es el estuche que contiene sus joyas, el aprisco que encierra su rebaño,<br />

y anhela verla sin mancha, tacha ni cosa semejante. Siente por ella anhelos<br />

de amor indecible. Esta es la razón por la cual <strong>nos</strong> ha dado oportunidades<br />

de trabajar para él, y acepta nuestras labores como prueba de nuestro amor y<br />

lealtad.<br />

Al poner entre <strong>nos</strong>otros los pobres y los dolientes, el Señor <strong>nos</strong> prueba para<br />

revelar<strong>nos</strong> lo que hay en nuestros corazones. La cultura de la mente y el corazón<br />

se lleva a cabo con más facilidad cuando experimentamos una tierna simpatía<br />

por los demás, la que <strong>nos</strong> impulsa a ofrecerles nuestros recursos y privilegios<br />

para aliviar sus necesidades...<br />

Las buenas obras <strong>nos</strong> cuestan un sacrificio, pero es en este mismo sacrificio<br />

que proveen disciplina. Estas obligaciones <strong>nos</strong> producen conflicto con sentimientos<br />

y propensiones naturales, y al cumplirlas ganamos victoria tras victoria<br />

sobre los rasgos objetables de nuestros caracteres.<br />

El mundo se convencerá no tanto por lo que el púlpito enseña como por lo<br />

que la iglesia vive. El predicador anuncia la teoría del Evangelio, pero la piedad<br />

práctica de la iglesia demuestra su poder. *<br />

* Año bíblico: Salmos 72-77.<br />

200

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!