06.05.2013 Views

04 07 los amigos de jashua tomo ii maestra hilarion de monte nebo

04 07 los amigos de jashua tomo ii maestra hilarion de monte nebo

04 07 los amigos de jashua tomo ii maestra hilarion de monte nebo

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

LOS AMIGOS DE JHASUA TOMO 2<br />

HILARION DE MONTE NEBO<br />

— ¡Qué sueño Dios!... ¡qué sueño! Soñé con Felipe —dijo en alta voz, viendo que Policarpo<br />

se incorporaba<br />

también. Con su buen humor <strong>de</strong> siempre, hablaba como una cotorra.<br />

—Pero a mí me disteis un buen susto —le contestó el joven. Y como Juan le mirase<br />

asombrado, Policarpo<br />

prosiguió.<br />

—Pasada la medianoche, entraste en la alcoba como un beodo y te tiraste al lecho como si<br />

cayeras<br />

muerto. ¿Qué te pasó?<br />

Ante estas manifestaciones <strong>de</strong> su joven amigo, Juan comenzó a cavilar, Dijo lo que él creía<br />

un simple<br />

sueño, <strong>de</strong>bió ser una realidad. Y pensaba... meditaba.<br />

—Policarpo —dijo por fin— eres muy joven, pero yo necesito un confi<strong>de</strong>nte. Créeme que no<br />

aguanto solo el<br />

peso <strong>de</strong> cuanto me ocurre.<br />

"¿Tienes valor para llevar una parte <strong>de</strong>l peso <strong>de</strong> mis secretos?<br />

— ¡Juan!... ¡me asustas!... Aquí en esta soledad en que vivimos, ¿es posible que nos<br />

persigan aún <strong>los</strong><br />

terrores <strong>de</strong> Roma?<br />

"Papías quiere venir también buscando tranquilidad, pero, si tampoco aquí po<strong>de</strong>mos<br />

tenerla...<br />

—No se trata <strong>de</strong> terrores como <strong>los</strong> <strong>de</strong> Roma, no te asustes —interrumpió Juan—. Mis<br />

secretos son como<br />

una continuación <strong>de</strong> <strong>los</strong> "Secretos <strong>de</strong>l Padre" que nos confiaba por gotas nuestro Divino<br />

Maestro. Son secretos<br />

que vienen <strong>de</strong>l Cielo, Policarpo, pero son tan gran<strong>de</strong>s que no puedo llevar<strong>los</strong> yo solo.<br />

El joven abrió gran<strong>de</strong>s sus ojos color <strong>de</strong> avellana y se quedó mirando a Juan como el que ve<br />

visiones extraterrestres.<br />

Se vistió apresuradamente la túnica y se acercó al lecho <strong>de</strong> Juan. Le tomó las manos, le tocó<br />

la frente.<br />

—No tienes fiebre, Juan, no estás enfermo. Tienes una oculta alegría en tus ojos v tintes <strong>de</strong><br />

rosa en tu<br />

rostro.<br />

—No estoy enfermo, no, pero no sé cómo tomarás mis secretos. Temo que me creas loco<br />

cuando te <strong>los</strong><br />

cuente.<br />

www.gftaognosticaespiritual.org GRAN BIBLIOTECA VIRTUAL ESOTERICA<br />

ESPIRITUAL<br />

534

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!