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Me mira de un modo inusual, en<br />
varias oportunidades insistió en que<br />
me depile. En otras épocas, jamás<br />
habría considerado esa posibilidad.<br />
Pero lo más extraño ocurre a la<br />
hora de unirnos. Se empecina en que<br />
lo hagamos de frente - cosa que nos<br />
resulta bastante incómoda – además<br />
de suplicarme que en lugar de aullar,<br />
hable.<br />
Giselle Aronson (Argentina)<br />
Diario de una<br />
mariposa en Luna<br />
llena<br />
Retraída en sus temores, pálida y<br />
anémica, decide encerrarse.<br />
Parada frente al espejo se ve<br />
transformada en reina religiosa,<br />
una mantis de gran tamaño que<br />
devora todas las orugas del lugar.<br />
Francis Santos (República<br />
Dominicana)<br />
La Guerra Divina:<br />
Transformación<br />
condenado a hundirse en el Lago del<br />
Olvido para que su cuerpo y espíritu<br />
sean consumidos y desaparecidos de<br />
la faz del Universo. Mientras se<br />
desintegraba seguía pensando en los<br />
responsables de su ira contra Dios,<br />
aquella que lo llevó a transformarse<br />
de uno de los hijos privilegiados del<br />
Altísimo, en un despiadado ejecutor<br />
de mundos. Cualesquiera que fueran,<br />
el egoísmo en ellos era demoledor,<br />
pensó por última vez.<br />
Sarko Medina Hinojosa (Perú)<br />
Bendecido con una<br />
maldición<br />
Solía mirar los amaneceres contigo,<br />
recorrer tu figura con la yema de los<br />
dedos, jugar con las sombras<br />
proyectadas sobre tu vientre.<br />
Por eso el verte salir huyendo por<br />
la puerta fue el fin.<br />
El bosque es un lugar muy<br />
solitario, incluso para alguien como<br />
yo.<br />
¿Fueron los niños?, pensó repetidas<br />
No quiero ver de frente al mundo<br />
que me ha sido negado, para qué, si<br />
sobre mi pecho llevo el estigma.<br />
veces, antes de entregar su espada de<br />
antimateria. ¿O fueron las mujeres?,<br />
Licántropo.<br />
reflexionaba mientras le despojaban Malditos, prisioneros de sí mismos.<br />
de su disparador de fotones. Intentó Yo, por lo menos soy libre. Ni una<br />
recordar si los ancianos fueron,<br />
maldición me quitará eso, jamás.<br />
mientras sus dagas de Onmilitium Espero impaciente que regreses a<br />
eran separadas de sus piernas.<br />
Desnudo y desarmado, el terrible<br />
serafín desertor Abaddona era<br />
buscarme. Sé que lo harás porque he<br />
marzo- abril, 2012 # 117 Revista Digital miNatura 47