04.07.2013 Views

Ilusiones perdidas

Ilusiones perdidas

Ilusiones perdidas

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

—Es una mejora que he hecho —dijo el viejo<br />

Séchard, interrumpiendo a su hijo.<br />

—Con todos sus utensilios: tinteros, tipos y bancos,<br />

etc., ¡mil seiscientos francos! Pero, padre —dijo<br />

David Séchard, dejando caer el inventario—, sus<br />

prensas son unos cacharros que no valen ni cien<br />

escudos y que sólo sirven para el fuego.<br />

—¿Cacharros?... —gritó el viejo Séchard—,<br />

¿cacharros?... ¡Coge el inventario y bajemos! Vas a<br />

ver si vuestras invenciones de mala cerrajerıá<br />

maniobran como esos viejos aparatos tan<br />

despreciados. Después no tendrá s el valor<br />

suiciente para injuriar a honestas prensas que<br />

marchan mejor que los coches correos y que aú n<br />

marchará n durante toda tu vida sin necesitar la<br />

menor reparació n: ¡Cacharros! ¡Sı́, son los<br />

cachorros los que te ayudará n a encontrar la sal<br />

para cocer los huevos que has de comer! Cacharros<br />

que tu padre ha manipulado durante veinte añ os y<br />

que le han servido para hacer de ti lo que ahora<br />

eres.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!