Tesina de Grado Alejandra Busto

comunicación masivos. Más allá de la polémica que establece extremando su posturaal afirmar que es la ideología del género la que instaura una cultura sin sexos parapretender luego una sociedad en donde todos los individuos sean iguales y lasdiferencias anatómicas no se cuestionen, Cancelliere remarca algunos puntossignificativos para la determinación de la equidad: “Es la aceptación de la diferencianatural el principio de una igualdad justa. Admitir las diferencias entre hombres y mujeres nosólo es cuestión de realismo y evidencia, sino de justicia y de respeto.” (Astarloa deCancelliere, 28 -11-06 diario La Nación)Establece la diferencia desde otra perspectiva, dos formas de ser persona:varón y mujer;y no por ello debieran considerarse desiguales en un intentodesenfrenado por abolir las diferencias; para ella esto es imposible y desde ahí forja lapolémica con la ideología de género.Así, no sería la naturaleza humana la quemarcaría alguna injusticia, sino precisamente las condiciones históricas y culturales enla vida de cada sociedad.“Sólo existen dos sexos: XX, femenino, y XY, masculino. Lasdistintas orientaciones sexuales son prácticas elegidas, pero estono significa que sean el comportamiento natural del hombre y dela mujer. (...) El principio de una sociedad más justa es laaceptación de la diferencia.” (Astarloa de Cancelliere, 28 -11-06 diario La Nación)De acuerdo a la investigación de la filósofa Marit Rullmann y la periodistaWerner Schlegel, es interesante reflexionar, por ejemplo, que los debates filosóficos entorno al ser humano y su naturaleza poco decían sobre la mujer y su condición social.“..con el tema de la humanidad siempre se significaba elhombre (el varón). Incluso muchos filósofos se mostraronexpresamente enemigos de las mujeres. (..) Aristóteles, porejemplo, no sólo aceptaba la sumisión de los esclavos, sinotambién la de las mujeres. Su función social se basaba sólo en lareproducción. (..) La mayor parte de los filósofos redujo a lasmujeres a su mundo afectivo y a menudo no les reconocieronrazón y capacidades del alma.” (Rullmann y Werner, 2004:53)Se instalaba la problemática sobre la inferioridad del sexo femenino. Se definíaa la mujer como el ‘no varón’, como el polo negativo, la privación por la carencia de la15