1200 FARMACIA HOSPITALARIAProfilaxis en pacientes con mal controlen ciclos anterioresOtra dificultad importante se plantea a la hora<strong>de</strong> diseñar una pauta apropiada para aquellos pacientesen los que la profilaxis estandar aplicadaen el ciclo anterior ha fracasado. Algunos datossugieren que la adición <strong>de</strong> un antidopaminérgicoa la combinación <strong>de</strong>l antagonista 5-HT 3 y el corticoi<strong>de</strong>mejora los resultados en un pequeño porcentaje<strong>de</strong> pacientes (109) .Recientemente ha resurgido el interés en la utilización<strong>de</strong> cannabinoi<strong>de</strong>s en este campo. En investigacionesrealizadas hace muchos años <strong>de</strong>mostraronser más eficaces que placebo y otrosantieméticos convencionales frente a quimioterapiamo<strong>de</strong>radamente emetógena. Sin embargo, no sehan estudiado frente a quimioterapia altamenteemetógena ni se han comparado con los antagonistas5-HT 3 y presentan una alta inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong>efectos secundarios a nivel <strong>de</strong>l SNC. Aunque pue<strong>de</strong>consi<strong>de</strong>rarse su utilización en casos refractarios,es necesario <strong>de</strong>finir con más exactitud su papel<strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l arsenal terapéutico.6.5. Prevención y tratamiento<strong>de</strong> la extravasaciónLa extravasación se <strong>de</strong>fine como la salida <strong>de</strong> líquidointravenoso hacia los tejidos adyacentes, yasea <strong>de</strong>bido a factores intrínsecos <strong>de</strong>l propio vaso oal <strong>de</strong>splazamiento <strong>de</strong> la cánula fuera <strong>de</strong> la vena.Sospechamos <strong>de</strong> su existencia cuando en el punto<strong>de</strong> acceso venoso concurren los siguientes signosy síntomas: dolor, prurito o quemazón, enrojecimientoo pali<strong>de</strong>z <strong>de</strong> la piel, hinchazón y piel fría ocaliente. Otros indicios pue<strong>de</strong>n ser el <strong>de</strong>scenso <strong>de</strong>la velocidad <strong>de</strong> infusión o la ausencia <strong>de</strong> retornovenoso a través <strong>de</strong> la cánula (110) . A veces pue<strong>de</strong>nocurrir extravasaciones a distancia <strong>de</strong>bidas a extraccionessanguíneas o cateterizaciones previas yrecientes en el mismo vaso en un lugar diferenteal <strong>de</strong> administración <strong>de</strong>l citostático (111) . Tambiénpue<strong>de</strong> observarse extravasación en el lugar <strong>de</strong> unaextravasación previa, al administrar el citostáticoen un sitio diferente (fenómeno <strong>de</strong> recuerdo) (112) .Hay que tener en cuenta al diagnosticarla que laextravasación pue<strong>de</strong> confundirse con otras reaccionesadversas en el punto <strong>de</strong> inyección (flebitisunida a dolor y vasoespasmo, hipersensibilidad,etc.) (113) .Los citostáticos, atendiendo a su acción agresivasobre los tejidos, se clasifican en: vesicantes (frecuentementeasociados a necrosis), irritantes (irritación local)y no agresivos.Para disminuir el riesgo <strong>de</strong> extravasación lo másimportante es una correcta prevención y controlar susfactores <strong>de</strong> riesgo. Debemos tener en cuenta los siguientesaspectos (114,115) :– La administración <strong>de</strong>be ser efectuada por personal especializado.– Utilizar catéteres periféricos <strong>de</strong> diámetro pequeño yevitar el uso <strong>de</strong> agujas con aletas. Emplear catéterescentrales si infusión continua o acceso venoso difícil.– Elección correcta <strong>de</strong>l lugar <strong>de</strong> venopunción.– Antes y durante la infusión <strong>de</strong>be comprobarse lapresencia <strong>de</strong> retorno venoso.– El or<strong>de</strong>n <strong>de</strong> administración, por falta <strong>de</strong> consenso, seráelegido por cada centro.– Lavar la vena antes y <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> la administración<strong>de</strong> cada dosis <strong>de</strong> citostático.– Utilizar bombas <strong>de</strong> perfusión sólo en administracióncentral; no emplearlas al administrar vesicanteso irritantes por vía periférica.– Observar frecuentemente la vía durante la administración.– El paciente <strong>de</strong>be comunicar al médico y/o enfermeratodo síntoma anómalo que aparezca durante laadministración.Los factores <strong>de</strong> riesgo <strong>de</strong> extravasación son (110,116) :– Pacientes con el sistema venoso <strong>de</strong>bilitado.– Pacientes con presión venosa elevada.– Pacientes con dificultad <strong>de</strong> comunicación.– Punciones en el dorso <strong>de</strong> la mano o cercanas a laszonas <strong>de</strong> flexión.– Punciones con agujas <strong>de</strong> acero.– Administración en infusión continua.Los dos puntos clave que <strong>de</strong>ben consi<strong>de</strong>rarse a lahora <strong>de</strong> enfrentarse a la extravasación <strong>de</strong> citostáticosson la rapi<strong>de</strong>z <strong>de</strong> actuación y la idoneidad <strong>de</strong> las medidasaplicadas. El tratamiento <strong>de</strong> la extravasación comienzacon la aplicación <strong>de</strong> las medidas iniciales, continúacon el tratamiento físico (frío o calor) yfarmacológico (antídoto correspondiente, si existe yes eficaz) y las medidas generales. Para su simplificaciónse pue<strong>de</strong> observar su conjunto en la Figura 1.
ONCOLOGÍA1201El dimetilsulfóxido, empleado como antídoto <strong>de</strong> lamayoría <strong>de</strong> citostáticos antraciclínicos, es un agentereductor que neutraliza a estos citostáticos oxidantes eincrementa la permeabilidad facilitando su <strong>de</strong>saparición<strong>de</strong>l lugar <strong>de</strong> la extravasación.La disponibilidad <strong>de</strong> un botiquín y <strong>de</strong> un protocolo<strong>de</strong> actuación en su interior son necesarios paraofrecer una respuesta inmediata y correcta ante unaextravasación. I<strong>de</strong>almente estos botiquines <strong>de</strong>ben estarubicados en los controles <strong>de</strong> enfermería don<strong>de</strong> seadministren antineoplásicos y en el Servicio <strong>de</strong> <strong>Farmacia</strong><strong>de</strong>be existir un lugar para su reposición. También<strong>de</strong>be contener la hoja <strong>de</strong> registro con el objeto <strong>de</strong> recogerlos inci<strong>de</strong>ntes producidos, así como los resultadosobtenidos tras aplicar las medidas protocolizadas(114,117).En el momento actual, la disponibilidad <strong>de</strong> unapágina “web” para el registro nacional <strong>de</strong> las extravasacionesnos permitirá conocer en mejor grado lamagnitud <strong>de</strong> este problema y el buen funcionamiento<strong>de</strong> nuestro protocolo.6.6 CardiotoxicidadLas antraciclinas en general, y la doxorrubicina ydaunorrubicina en particular, son los antineoplásicosmás frecuentemente implicados en la producción <strong>de</strong>cardiotoxicidad. Se ha postulado que este efecto estámediado por la producción <strong>de</strong> radicales libres que inducenla formación <strong>de</strong> complejos hierro-antraciclinas.Los signos precoces son las anomalías en el electrocardiogramae hipotensión arterial durante su administraciónintravenosa. Estos cambios pue<strong>de</strong>n sertransitorios y no obligan a suspen<strong>de</strong>r el tratamientoen un 2 a 30% <strong>de</strong> pacientes, pero también pue<strong>de</strong>nevolucionar hacia una miocardiopatía con clínica <strong>de</strong>insuficiencia cardiaca.La cardiotoxicidad es dosis-<strong>de</strong>pendiente (118) .Porejemplo, para la doxorrubicina, la inci<strong>de</strong>ncia <strong>de</strong> miocardiopatíaclínica es <strong>de</strong> 1-2% para una dosis acumulada<strong>de</strong> 450 mg/m 2 , un 7% para 550 mg/m 2 y 30% para700 mg/m2 (119) . Estas cifras <strong>de</strong> toxicidad pue<strong>de</strong>n aumentaren caso <strong>de</strong> irradiación simultánea <strong>de</strong> la pared torácicao <strong>de</strong>l mediastino, la existencia <strong>de</strong> una cardiopatíaprevia o la administración concomitante <strong>de</strong>citostáticos cardiotóxicos (fluorouracilo, ciclofosfamida,metotrexato). Se consi<strong>de</strong>ra que a partir <strong>de</strong> los550 mg/m 2 en adultos existe un riesgo <strong>de</strong> cardiotoxicidadclínicamente no aceptable. La aparición <strong>de</strong> insuficienciacardiaca congestiva o la disminución <strong>de</strong> lafracción <strong>de</strong> eyección ventricular por <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong>l 50% <strong>de</strong>lvalor inicial, requieren la suspensión <strong>de</strong>l tratamientoCon el objeto <strong>de</strong> minimizar el riesgo <strong>de</strong> cardiotoxicidadse han planteado diferentes alternativas:– Tener en cuenta parámetros o aspectos farmacocinéticosque contribuyen a una mayor cardiotoxicidad.Por ejemplo, al asociar paclitaxel a doxorrubicinaen el cáncer <strong>de</strong> mama metastásico, disminuye la eliminaciónhepática <strong>de</strong>l doxorrubicinol (metabolitoprincipal <strong>de</strong> la doxorrubicina). En este caso la dosisacumulada <strong>de</strong> doxorrubicina no <strong>de</strong>bería superar los360 mg/m 2 y ser administrada un mínimo <strong>de</strong> 16 horasantes <strong>de</strong>l paclitaxel (vida media <strong>de</strong> doxorrubicinay <strong>de</strong> doxorrubicinol) (120) . Otra alternativa es remplazardoxorrubina por epirrubicina, ya que el metabolitoprincipal <strong>de</strong> esta última es menos cardiotóxico(121) .– Modificar la dosis o el modo <strong>de</strong> administración <strong>de</strong> lasantraciclinas. Su toxicidad está ligada a la cmax; porello, la administración <strong>de</strong> doxorrubicina en perfusióncontinua <strong>de</strong> 72 horas disminuye la inci<strong>de</strong>ncia<strong>de</strong> miocardiopatías (122) . La encapsulación <strong>de</strong> doxorrubicinaen liposomas también disminuye la cardiotoxicidad,si bien también se ha <strong>de</strong>scrito insuficienciaventricular con dosis acumuladasimportantes <strong>de</strong> estos nuevos productos (también serecomienda un límite <strong>de</strong> 550 mg/m 2 para estos productos)(123) .– Administrar simultáneamente cardioprotectores comoel <strong>de</strong>xrazoxano (ver apartado <strong>de</strong> quimioprotectores,más a<strong>de</strong>lante) o inhibidores <strong>de</strong> las enzimas <strong>de</strong>conversión <strong>de</strong> la angiotensina (ramipril, enalaprilo).– Modular la dosis <strong>de</strong> la antraciclina. Por ejemplo, reducirla dosis en función <strong>de</strong> la bilirrubina sérica y <strong>de</strong>las transaminasas en caso <strong>de</strong> insuficiencia hepatocelular.En estos casos sería preferible la epirrubicina ala doxorrubicina por vida media, aclaramiento y farmacocinética.– Utilizar nuevos análogos menos cardiotóxicos comola idarrubicina oral (124) , la epirubicina, o la mitoxantronaIV. Estos agentes permiten alcanzar dosisacumuladas más elevadas en relación a sus dosis terapéuticas.A<strong>de</strong>más <strong>de</strong> las antraciclinas existen otros antineopásicosque presentan toxicidad cardiaca. La cardiotoxicidad<strong>de</strong>l 5-fluorouracilo está asociada a unefecto tóxico <strong>de</strong>l fluoroacetal<strong>de</strong>hído, producto <strong>de</strong> su<strong>de</strong>gradación, sobre el miocardio. Su inci<strong>de</strong>ncia se si-