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REVISTA PESCA AGOSTO 2017

La revista Pesca es un medio de información alternativo referido a temas del mar y de la pesquería. Proporciona información, ideas y opiniones obtenidas de fuentes diversas, que tienen por objeto exponer la problemática de la pesca en el Perú y el mundo.

La revista Pesca es un medio de información alternativo referido a temas del mar y de la pesquería. Proporciona información, ideas y opiniones obtenidas de fuentes diversas, que tienen por objeto exponer la problemática de la pesca en el Perú y el mundo.

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ocho columnas en el Bild-Zeitung de Hamburgo decía:<br />

“Bombas sobre marinos de Hamburgo: nuestros hombres del<br />

mar tratados como piezas de caza”. Las familias de los tripulantes<br />

exigían información relativa a la seguridad de sus seres<br />

queridos. Los temores se calmaron el 22 de noviembre, cuando<br />

la agencia de Onassis en Hamburgo recibió un telegrama<br />

del capitán Reichert: “Todas las restricciones sobre las tripulaciones<br />

a bordo de los barcos, así como en tierra, suspendidas<br />

(…) Nuestra gente todos en buen estado de salud, mandan<br />

saludos a sus parientes”.<br />

Cuando los investigadores peruanos revisaron el confiscado<br />

Challenger, la bitácora indicaba que casi tres mil ballenas se<br />

habían cazado en las inmediaciones de la costa peruana. En<br />

menos de dos semanas de la captura de la flota, los Tribunales<br />

Navales peruanos habían multado a la Olympic Whaling<br />

Company con tres millones de dólares. Si la multa no era pagada<br />

inmediatamente, Perú amenazaba con incorporar los<br />

barcos de Onassis a la Armada Peruana. Onassis se rió de la<br />

amenaza considerándola como “un sueño loco peruano”.<br />

Alemania ya había protestado por las acciones de los peruanos,<br />

y el gobierno británico pronto habría de seguir el mismo<br />

curso, apoyando a Onassis y su expedición ballenera, señalando<br />

que el Perú no tenía el derecho legal para evitar que los<br />

balleneros surcaran las aguas del mar a lo largo de las costas<br />

peruanas. Los británicos recomendaron a Onassis “poner a<br />

prueba” la validez del límite peruano de las 200 millas”.<br />

Finalmente, el 13 de diciembre de 1952 un representante de<br />

Onassis y un alto funcionario del Ministro de las Finanzas del<br />

Perú, se reunieron para completar el pago de la multa. El dinero<br />

había sido remitido a Lima, procedente del City Bank de<br />

Nueva York. El representante de Onassis pagó la multa asignada<br />

al funcionario peruano, pero no sin presentar una propuesta<br />

formal al gobierno peruano. Se le concedió al Sr.<br />

Alemán el permiso para que apelara la multa de un tribunal<br />

superior. El gobierno peruano anunció que el pago de la multa<br />

quería decir que el límite marítimo del Perú era sagrado.<br />

De esa manera Perú obtuvo la seguridad que le daba reconocimiento<br />

mundial a su soberanía sobre las 200 millas de mar<br />

territorial. (“ONASSIS – F. Brady“).”<br />

Fuente<br />

https://reportperu.wordpress.com/2010/04/11/1952-peruhace-respetar-%E2%80%9Cmanu-militari%E2%80%9D-susoberania-maritima-ante-flota-de-onassis/<br />

“En 1945, Estados Unidos, México y Argentina, de manera<br />

independiente, proclaman su derecho a explotar las plataformas<br />

continentales y las aguas que las cubren. En 1947 Chile<br />

proclama lo propio sobre las 200 millas marítimas, acicateado<br />

por la invasión de las flotas de balleneros que inundaban el<br />

Océano Pacifico y depredaban los mares del sur. Perú, Chile y<br />

Ecuador realizan una declaración conjunta que defenderán la<br />

soberanía hasta el límite de las 200 millas, dado que tenían<br />

intereses comunes los defenderían. La costumbre y norma<br />

hasta entonces era que el zócalo continental era considerado<br />

hasta el límite donde se llegue a la profundidad de 200 metros,<br />

esto beneficiaba a muchos países que tenían playas en<br />

el Océano Atlántico pero perjudicaba a los países que circundaban<br />

el Océano Pacifico, que se profundiza rápidamente. Las<br />

200 millas eran una forma de lograr la equidad entre los países.<br />

Dado este contexto, durante el gobierno de Manuel A. Odría,<br />

el 16 de noviembre de 1954 la flota ballenera de Onassis<br />

irrumpió en el mar peruano, por lo que de inmediato el Presidente<br />

ordenó la captura de las embarcaciones, logrando detener<br />

a 5 naves. El barco nodriza, el Olympic Challenger emitió<br />

por radio un mensaje que fue recogido en Panamá: “... estamos<br />

siendo bombardeados y recibimos disparos de aviones<br />

del Perú”.<br />

Los tripulantes de la flota ballenera de Onassis dijeron que<br />

ellos estaban a 380 millas y las autoridades del Perú que los<br />

barcos estaban dentro de las 200 millas, como quiera que<br />

haya sido los barcos fueron capturados.<br />

Una división de destructores capturo cuatro de los 5 barcos y<br />

el quinto fue forzado por un avión de la FAP a dirigirse al<br />

puerto de Talara como prisionero. La flota entera fue sorprendida<br />

a 180 millas de Punta Aguja y se rindieron sin resistencia.<br />

Otros barcos peruanos patrullaban el mar en búsqueda<br />

de la “flota pirata”. Las autoridades dijeron que los barcos<br />

peruanos tenían órdenes expresas de abrir fuego contra cualquier<br />

embarcación de la flota ballenera que ofrezca resistencia<br />

armada. Al menos uno de los buques de Onassis tenía<br />

armas. Finalmente la flota fue objeto de una multa de tres<br />

millones de dólares para ser liberada. El proceso fue escrupuloso<br />

legalmente y rápido.<br />

Los destructores Aguirre y Rodríguez apresaron a los balleneros<br />

Olympic Victor y Olympic Lightning, a unas 180 millas<br />

frente a Punta Aguja. Otros dos balleneros fueron capturados<br />

por los mismos destructores 40 millas más al sur, frente al<br />

puerto petrolero de Talara. Un quinto ballenero fue obligado a<br />

entrar al puerto citado por un avión peruano.<br />

Las protestas diplomáticas no se hicieron esperar. Los británicos,<br />

indicaron que la flota ballenera estaba asegurada por la<br />

firma Lloyd’s, de Londres, y además Inglaterra no reconocía<br />

el límite de las 200 millas. La respuesta del Presidente Odría<br />

fue que “los procedimientos y actitudes asumidos por el Perú,<br />

en relación con la flota ballenera del citado Onassis, son actos<br />

de soberanía, en cuyo respecto mi Gobierno no puede aceptar<br />

reservas o reclamaciones”.<br />

La firma Lloyd’s estuvo de acuerdo con pagar la multa de tres<br />

millones de dólares impuesta por el gobierno peruano a<br />

Aristóteles Onassis, considerando que la flota ballenera estaba<br />

asegurada en más de cuatro millones de libras esterlinas.<br />

El 14 de diciembre, los cinco balleneros fueron puestos en<br />

libertad.<br />

Este suceso consagro la soberanía peruana en las 200 millas<br />

del mar de Grau ante la comunidad internacional”<br />

Fuente<br />

http://polidrez.blogspot.pe/2010/04/las-200-millas-de-marperuano-y-la.html<br />

Revista Pesca Agosto <strong>2017</strong> 81

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