Cordero de Dios. La sustitución como mecanismo de Dios. El fin de los sacrificios
Análisis de la sustitución como mecanismo que ha realizado Dios, a través de la historia casi reciente de la humanidad, para lograr reencauzarla llevándola al camino del amor al prójimo, alejándola de falsas espiritualidades y errores en las concepciones de la divinidad. Reemplazos necesarios para sustituir lo errado, lo malo, lo peligroso -de supuestas espiritualidades-, por lo bueno, lo sano, lo edificante, lo amoroso. Sustituyendo, reemplazando, el odio por el amor, y la muerte por la vida.
Análisis de la sustitución como mecanismo que ha realizado Dios, a través de la historia casi reciente de la humanidad, para lograr reencauzarla llevándola al camino del amor al prójimo, alejándola de falsas espiritualidades y errores en las concepciones de la divinidad. Reemplazos necesarios para sustituir lo errado, lo malo, lo peligroso -de supuestas espiritualidades-, por lo bueno, lo sano, lo edificante, lo amoroso. Sustituyendo, reemplazando, el odio por el amor, y la muerte por la vida.
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enojara con el pueblo egipcio y los castigara. Por
supuesto… el Nilo apestó con el olor de la sangre
putrefacta.
Al final de la plagas en Egipto Dios vuelve a golpear
en los primogénitos egipcios, primogénitos
que habían sido sacrificados por ellos a sus dioses
[i] y que ahora la sangre del cordero en las puertas
de los hebreos les recordaba cuan inútil había sido
la muerte y la sangre derramada.
A través de los hebreos Dios les devolvía un espejo
de la sangre que inútilmente había sido vertida
en sus sacrificios.
Con los hebreos Dios lleva lentamente a su final
a una época de la humanidad en que la norma fue
el pago por la redención.
La sangre del cordero en las puertas de los hebreos
evitó que sus primogénitos murieran junto
con los de los egipcios. Los hebreos con esa marca
en sus puertas mostraron al ángel exterminador
que sus hogares no estaban manchados de sangre
humana. La sangre en las puertas hebreas era de
corderos.
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