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pero necesaria, do Ia redención, para iaeonsolidación do Ia propiedad. De asto
tenIan que derivarse dos cosas: es Ia primera, lade qtle no babiendo habido
anterior dueño, no so ha sabido 01 se sabe aün ft favor do quién estft hecho
el reconocimiento, por me que ci Gobierr.o Federal baya dictado posterior.
meute algunas disposiciones de condonación; y es Ia esgunda, lade que ci peligro
posible de una redenciôn. ha producido una deprecia.iôo considerable
del valor de las fracciones, Ia. que so ha heho sentir en eada caso (Ic yenta de
ellas, pues siempre el compTalor deduce dcl precio ui-ia parte del valor de
adjudicaciôn, si o lo reduce todo. Por (iltimo, sienilo c yino es tan insignificante
el valor tic cada fracciôn do repartimiento, puesto que ningurla h
podido exceder de doscientos pesos, ni aün en el caso de que le tocara a! parcicnero
reepectivo unit de precio ma yor, porque no hahiendo disposiciôn alguna
quo prevea ese caco, lit práctica ha hecho que entonces el t&-rreno se
divida en fracciones menores, p.ra que tods quepan dentro dcl If mite oxpresado;
siendo tan insigoificante el valor le cadit fracciSn. decimos, no
pueden desprenderse del tftulo tie adjuciicaciôri de ella, io' deinás tItuloa
tiececarios lana quo exista lit titulación sucesiva, las nuecas operaciones
que hayan de hacerse, no teniendo y-a Ia excepción dc lit liheraci(in
de gastos y trftmitee, tierien quo ser hechas con los gastos noteriales comunes,
demasiado alto para son posihies. Unit vez expedulo el titulo de adjudicación,
ci adudicatario in guard : Si tiene quo vernier el terreno, transfiere
Ci tItulo coixto ci foci-a un tItulo al portador; si tnuere, sus herederos . iguen
poaeyendo ci terreno cnn él, formando todos una nuevapropiedad comunal.
Despus do cierto tiempo es iniposible encadenar Ia titulacion: los
gastos de ccc trabajo, importaran mucho mfis quo el terreno mismo. Acerca
de ecto teneruos unit gran expericflcia.
Por lo dems, lit Desamortizacôn. ft pesar de Ia enffttica prescripción del
artfculo 25 do lit Icy do 25 de jur,io, no so ha hecho comb ya dijimos, en la
comunidades rancher'uzs, oh en todas las coniunidades pub1o; it partir de
Ia byes do Xacionaliz,ciôn, lit (loamortizaciôn Ic estas filtirnis comunidtdes,
so ha beeho con poco ernpeño, por fortuna. A ella responden todaIa
conecuencias inespe-radas; en estoc filtimos tiempos Ia reparticiin de io
pueblos produce ui-i resuitado fatal, y cc ci de hacer desaparecer con incrIbit
violenda, Ia arbol.-da do I.s montes do esos pueblos: 1a fraccionee moy
pequefias tic monte. cob protiucen cuando se arracan.
FunciOn de las leycs de NacionalizaciOn —Las leyes de Nacionalización
coriigieron en mucho ft las de Desamortizaeión, porque hicieron entrar
iii dominio privado, toios los bienec de Ia Igiesia; no solo los biene
rafces, Sino los capitales impuestos sobre ellos. Esto hizo quo ci movimiento
de Ia propiedad, coineuzado por lit DesamortizaciOn, so Iiwitara ft sOlo los
bienes eclesiftsticos, deteniéndose y afin retrocediendo en los dcmfta bienes
desamortizables. Por lo quo respecta ft aquéilos. Ia DeeamortizaciOn se confundió
con Ia NacionalizaciOn, y esa circunta.ncia facilitO y acebcrO ci movjmiento
iniciado, mostrando ciaramente cuftnt mejores fueron las it-yes que