Consensos en las presentaciones sobre la regionalización oceánica

Discusiones temáticas y plenaria 191
de sismos o áreas completas generadoras de sismos. Esto conlleva a dos regionalizaciones
oceánicas: una superficial (el primer medio kilómetro) y otra
profunda; ambas, en casos requeridos, son posibles de conjuntar.
Criterios o elementos para establecer los 500 m de
franja superficial
A partir de la dinámica oceánica se pueden distinguir tres franjas: la superficial,
la intermedia y el fondo. Las aguas más estancadas en el océano, y por lo
tanto las más antiguas (en el sentido de que hace mucho más años han estado
en contacto con la atmósfera) son las intermedias, entre los 500 y 1, 200 m. Los
físicos reconocen que, fenómenos como los chorros que viajan perpendiculares
desde la costa hacia la parte oceánica, los remolinos y demás fenómenos,
no rebasan los 500 m. Las variables que se están proponiendo en los trabajos
presentados en el capítulo oceánico describen una capa muy superficial, donde
la temperatura medida corresponde únicamente a la de los primeros milímetros;
el nivel de mar es nada más el que dan las corrientes superficiales; los
vientos también dan una superficie; y el color del mar es la primera profundidad
óptica, 6 a 8 m. Entonces, si consideramos también los procesos físico-atmosféricos,
lo más adecuado es trabajar hasta los 500 m de profundidad.
En la parte superficial del mar, se deben utilizar de preferencia, pocas variables
que sean sencillas de medir y de bajo costo, como son las de sensores
remotos. Se proponen, a reserva de que siempre se podrán incorporar otras,
las cuatro básicas, que son temperatura, nivel de mar, vientos y concentración
de clorofila. De todas ellas se puede obtener información de la NASA,
e integrar toda la información para construir estas “películas” o productos
dinámicos.
Otras características que pueden definir las zonas en la regionalización superficial
son los eventos extremos, que también deben ser tomados en cuenta;
las cuatro variables señaladas anteriormente, más los eventos extremos que
ocurren en las diferentes zonas, permitirían hacer una buena regionalización.
Durante la discusión en la mesa se habló de la posibilidad de que las 12
millas no fueran definidas con criterios científicos sino políticos.
Otros criterios importantes en la regionalización de la parte superficial son
el reconocimiento de la variación interanual e interdecadal, y la necesidad de
contar con la información suficiente para ayudar a construir modelos para
predicción, por ejemplo, de cuestiones climáticas y pesqueras, e incluir los