Consensos en las presentaciones sobre la regionalización oceánica

88 Anamaría Escofet
han dinamizado la convergencia de disciplinas e integración de técnicas para
sistematizar patrones y procesos de diferentes escalas (Ross 1994). Por lo que eso
implica en la planeación y regulación del uso de recursos, y consecuente bienestar
de la población, las agencias de gobierno y de investigación han respondido
concordantemente (Loeb y Spacie 1994, Caldow y Racey 2000).
Los métodos de regionalización tienen diferentes alcances en los medio
marino y terrestre (Longhurst 1998). Por incluir ambos medios, la zona costera
impone fuertes demandas a la planeación y manejo, y su regionalización
exige conocer los esquemas en cada uno de ellos. En este artículo se muestra
que un espacio de zona costera puede ser coherente con los espacios marinos
y terrestres reconocidos, y las particularidades de su expresión en México. Se
presentan 11 unidades costeras homogéneas formadas por un gradiente latitudinal
marino y un gradiente latitudinal terrestre, y una regionalización de
seis grupos, con su equivalente político-administrativo.
Desarrollo
Los límites de la zona costera: una revisión crítica orientada al
manejo
En este trabajo se propone que los límites de la zona costera (ZC) pueden
ubicarse dentro de un esquema general de franjas paralelas a la costa, que abarca
desde las mayores elevaciones hasta las mayores profundidades. De ese modo,
es posible delinear la ZC como un recorte del territorio emergido y del territorio
sumergido, y visualizarla como parte de un continuo que, al mismo tiempo, admite
límites formales y enlaces específicos hacia tierra y mar (figura 1).
Sin embargo, para componer un esquema integral como el anterior, es necesario
examinar una serie de aproximaciones parciales, que se presentan a
continuación. En general, el hablar de ZC alude a algún espacio cercano a la
línea de costa, ya sea desde la tierra o desde el mar. Varios autores, en apego al
principio de que los rasgos físicos permanentes del territorio son la base primaria
para su análisis, consideran que el límite terrestre de la ZC es la isohipsa
de los 200 m sobre el nivel medio del mar (snmm), y que el límite marino es la
isobata de los 200 m de profundidad (Merino 1987).
Sin embargo, las definiciones de zona costera son muy variadas, y no siempre
contienen elementos referenciables físicamente. En una extensa revisión,
Sorensen (1997) señaló que el término zona costera se aplicaba a una gran