Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
<strong>de</strong> todo, quizá sea la mejor manera <strong>de</strong> morir rápidamente. Eso<br />
me tiene enferma. Miep cuenta todos esos horrores <strong>de</strong> manera<br />
tan impresionante, que <strong>el</strong>la misma se siente convulsionada. Un<br />
ejemplo reciente: Miep encontró ante su puerta a una vieja judía<br />
paralítica, aguardando a la Gestapo, que había ido a buscar un<br />
auto para transportarla. La pobre vieja se moría <strong>de</strong> miedo a causa<br />
<strong>de</strong> los bombar<strong>de</strong>os <strong>de</strong> los aviones ingleses y temblaba viendo los<br />
haces luminosos que se cruzaban en <strong>el</strong> ci<strong>el</strong>o como flechas. Miep<br />
no tuvo <strong>el</strong> valor <strong>de</strong> hacerla entrar en su propia casa; nadie se<br />
hubiera atrevido a hacerlo. Los alemanes castigan tales acciones<br />
sin clemencia. Elli también tiene motivo para estar triste: su novio<br />
tiene que partir para Alemania. Ella teme que los aviadores que<br />
vu<strong>el</strong>an sobre nuestras casas <strong>de</strong>jen caer su cargamento <strong>de</strong> bombas,<br />
a menudo <strong>de</strong> millares <strong>de</strong> kilos, sobre la cabeza <strong>de</strong> Dirk. Bromas<br />
tales como que «nunca recibirá mil» y «una sola bomba basta»,<br />
me parecen fuera <strong>de</strong> lugar. Cierto que Dirk no es <strong>el</strong> único obligado<br />
a partir; todos los días salen trenes atestados <strong>de</strong> jóvenes <strong>de</strong> uno y<br />
otro sexo <strong>de</strong>stinados al trabajo obligatorio en Alemania. Cuando<br />
se <strong>de</strong>tienen en <strong>el</strong> trayecto, en tal o cual cruce, algunos tratan <strong>de</strong><br />
escapar o pasar a la clan<strong>de</strong>stinidad; eso resulta a veces, pero en<br />
muy pequeña proporción.<br />
Aún no he terminado con mi oración fúnebre. ¿Has oído<br />
hablar alguna vez <strong>de</strong> rehenes? Es su último invento para castigar<br />
a los saboteadores. La cosa más atroz que pueda imaginarse.<br />
Ciudadanos inocentes y absolutamente respetables son arrestados,<br />
y aguardan en la cárc<strong>el</strong> su con<strong>de</strong>na. Si <strong>el</strong> saboteador no aparece la<br />
Gestapo fusila a un número <strong>de</strong> rehenes sin más ro<strong>de</strong>os. Los <strong>diario</strong>s<br />
publican a menudo las esqu<strong>el</strong>as mortuorias <strong>de</strong> esos hombres, ¡bajo<br />
<strong>el</strong> título <strong>de</strong> acci<strong>de</strong>nte fatal! ¡Hermoso pueblo, <strong>el</strong> alemán! ¿Y pensar<br />
que yo pertenecía a él! Pero no, hace mucho tiempo que Hitler<br />
nos hizo apátridas. Por lo <strong>de</strong>más, no hay enemigos más gran<strong>de</strong>s<br />
que estos alemanes y los judíos.<br />
Tuya,<br />
ANA<br />
© Pehuén Editores, 2001.<br />
)25(<br />
EL DIARIO DE ANA FRANK<br />
Viernes 16 <strong>de</strong> octubre <strong>de</strong> 1942<br />
Querida Kitty:<br />
Estoy muy ocupada. Acabo <strong>de</strong> traducir un capítulo <strong>de</strong> La<br />
B<strong>el</strong>le Nivernaise, anotando las palabras cuyo significado<br />
<strong>de</strong>sconocía. He resu<strong>el</strong>to también un difícil problema <strong>de</strong><br />
matemática, y he escrito tres páginas <strong>de</strong> gramática francesa. Me<br />
niego a resolver problemas <strong>de</strong> matemática todos los días. Papá<br />
los <strong>de</strong>testa también: yo me las arreglo mejor que él, pero, a <strong>de</strong>cir<br />
verdad, ni <strong>el</strong> uno ni <strong>el</strong> otro nos sentimos muy fuertes, <strong>de</strong> manera<br />
que, a menudo, necesitamos recurrir a Margot. Yo soy la más<br />
ad<strong>el</strong>antada <strong>de</strong> los tres en taquigrafía.<br />
Ayer terminé <strong>de</strong> leer Los asaltantes. Es encantador pero aún<br />
así está lejos <strong>de</strong> Joop ter Heul. En general, consi<strong>de</strong>ro a Cissy van<br />
Marxv<strong>el</strong>dt un autor formidable. Tengo la firme intención <strong>de</strong><br />
permitir que mis hijos lean todos sus libros.<br />
Mamá, Margot y yo somos <strong>de</strong> nuevo las mejores amigas d<strong>el</strong><br />
mundo; es mucho más agradable. Anoche Margot vino a ten<strong>de</strong>rse<br />
a mi lado. Ambas en mi cama tan minúscula, no tienes i<strong>de</strong>a <strong>de</strong> lo<br />
divertido que era. Ella me preguntó si un día podrá leer mi <strong>diario</strong>.<br />
Le dije que le permitiría leer ciertos pasajes; le pedí lo mismo en<br />
cuanto al suyo, y está <strong>de</strong> acuerdo. De una cosa a otra, hablamos<br />
d<strong>el</strong> porvenir. Le pregunté qué quería ser, pero <strong>el</strong>la no quiere hablar<br />
<strong>de</strong> eso y lo mantiene en gran secreto. Habló vagamente <strong>de</strong> la<br />
enseñanza; no sé si <strong>el</strong>la hará algo en ese sentido, pero creo que sí.<br />
En <strong>el</strong> fondo, yo no <strong>de</strong>bería ser tan curiosa...<br />
Esta mañana me tendí en la cama <strong>de</strong> Peter, <strong>de</strong>spués <strong>de</strong> echarlo<br />
<strong>de</strong> allí. Estaba furioso, lo que me importa bien poco. Ya es hora<br />
<strong>de</strong> que se muestre un poco más amable conmigo; anoche le regalé<br />
una manzana.<br />
Le he preguntado a Margot si me encuentra fea. Ella me ha<br />
dicho que tengo una expresión muy divertida y ojos bonitos.