Masonería - J. Boor - Gran Logia Provincial de las Islas Baleares
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epresentaba al conocido masón Augusto Barcia, en cuya memoria, presentada a su<br />
regreso a Madrid, refiere <strong>las</strong> gestiones llevadas a cabo en Ginebra y en París en servicio<br />
dc <strong>las</strong> logias españo<strong>las</strong>. Nos confiesa el autor cómo antes <strong>de</strong> partir consultó al consejo<br />
fe<strong>de</strong>ral simbólico <strong>de</strong>l gran oriente español su criterio, aprobado por aquél, respecto a la<br />
situación <strong>de</strong> la masonería en España, en que se recogían <strong>las</strong> dificulta<strong>de</strong>s que <strong>las</strong><br />
activida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> <strong>las</strong> logias encontraron en Andalucía y el amparo que el subsecretario <strong>de</strong> la<br />
Presi<strong>de</strong>ncia, señor Nouvi<strong>las</strong>, les ofreció; pero el temor <strong>de</strong> que volviesen a reproducirse <strong>las</strong><br />
dificulta<strong>de</strong>s le hacía expresarse con el siguiente y elocuente párrafo: “Si estos días <strong>de</strong><br />
verda<strong>de</strong>ra adversidad y peligro llegasen, “sólo un apoyo exterior” podría ser el medio<br />
eficaz para mantener a raya a nuestros enemigos.” Estimaba, en previsión <strong>de</strong> que este<br />
suceso llegase a producirse, “la conveniencia <strong>de</strong> aprovechar la reunión <strong>de</strong> Ginebra para<br />
hacer una información fi<strong>de</strong>digna y completa <strong>de</strong> nuestra situación”. Por lo que consta en la<br />
memoria, fué aprobada y calurosamente aplaudida la previsión <strong>de</strong>l comisionado.<br />
A su tenor nos dice haber obrado al llegar a Ginebra, tratando con los miembros <strong>de</strong>l<br />
comité consultivo la situación española, con los que acordó esperar a que se tratase en el<br />
Or<strong>de</strong>n <strong>de</strong>l día el caso <strong>de</strong> Italia para hacer él sus manifestaciones sobre España. Llegado<br />
ese día se expresó en la sesión pública en los siguientes términos: “Que sus inquietu<strong>de</strong>s y<br />
persecuciones no nacían <strong>de</strong>l Gobierno <strong>de</strong>l Directorio, sino <strong>de</strong>l proce<strong>de</strong>r <strong>de</strong> <strong>las</strong> autorida<strong>de</strong>s<br />
locales bajo la presión <strong>de</strong> elementos reaccionarios que aprovechaban esta coyuntura, que<br />
suponían favorable, para combatirnos y vencernos.” En prueba <strong>de</strong> su tesis recordó “todo lo<br />
ocurrido en Andalucía, don<strong>de</strong> <strong>las</strong> autorida<strong>de</strong>s locales tuvieron que rectificar todas <strong>las</strong><br />
medidas que habían tomado contra la or<strong>de</strong>n, en virtud <strong>de</strong> ór<strong>de</strong>nes concretas y terminantes<br />
emanadas <strong>de</strong> Madrid”.<br />
Al siguiente día <strong>de</strong> esta <strong>de</strong>claración, relata que llegó a su po<strong>de</strong>r una “plancha” <strong>de</strong>l<br />
gran consejo fe<strong>de</strong>ral simbólico haciéndose cargo <strong>de</strong> una iniciativa <strong>de</strong> la gran logia <strong>de</strong>l<br />
Nor<strong>de</strong>ste, en la que se pedía “se gestionase un apoyo oficial <strong>de</strong> <strong>las</strong> potencias masónicas<br />
reunidas en Ginebra para poner fin a <strong>las</strong> medidas ilegales <strong>de</strong> mortificación y vejación <strong>de</strong><br />
que eran objeto”, llegando a Ginebra directamente un <strong>de</strong>legado <strong>de</strong> aquella gran logia<br />
portador <strong>de</strong> otra “plancha” en la que constaban aquellos acuerdos y “<strong>de</strong>mandando una<br />
gestión suficientemente eficaz para lograr los apoyos solicitados”.<br />
Después <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s cabil<strong>de</strong>os y consi<strong>de</strong>rar que no convenía hacer pública ante <strong>las</strong><br />
otras logias una confesión <strong>de</strong> importancia y recibir una tutela mortificante en su condición<br />
<strong>de</strong> francmasones españoles, se acordó poner a los comisionados en relación con el comité<br />
consultivo <strong>de</strong> la A. M. I., como así sucedió. Dice a este respecto el masón Barcia en su<br />
memoria:<br />
“Supe entonces lo que habían sido <strong>las</strong> gestiones hechas en Basilea y que <strong>de</strong> el<strong>las</strong><br />
había pendiente una que había <strong>de</strong> celebrar el gran oriente <strong>de</strong> Francia con nuestro<br />
embajador en París. Como esto, aunque en forma atenuada, era una intervención <strong>de</strong>l<br />
exterior en nuestros asuntos <strong>de</strong> vida interior, expuse la conveniencia <strong>de</strong> que esa gestión<br />
fuese hecha directamente por un español, que bien podría ser el propio <strong>de</strong>legado <strong>de</strong><br />
Barcelona. Me insinuó éste, con <strong>de</strong>lica<strong>de</strong>za que agra<strong>de</strong>cí y agra<strong>de</strong>zco, que, siendo yo el<br />
representante <strong>de</strong>l consejo fe<strong>de</strong>ral simbólico en la asamblea, yo era el llamado a cumplir<br />
esta misión, y no dudé en aceptar y me ofrecí a ir a París.<br />
“Allí invité al <strong>de</strong>legado <strong>de</strong> la gran logia <strong>de</strong>l Nor<strong>de</strong>ste a que me acompañase en la<br />
visita que yo había <strong>de</strong> llevar a cabo al día siguiente, ya que telefónicamente había pedido<br />
ser recibido por nuestro embajador. El señor <strong>de</strong>legado extremó su confianza en mí y su<br />
<strong>de</strong>lica<strong>de</strong>za hasta el límite <strong>de</strong> rogarme que yo fuese solo a la entrevista, ya que la presencia<br />
<strong>de</strong> él podía coartar la libertad <strong>de</strong>l embajador, a quien no conocía personalmente.<br />
“Celebrada la visita, que duró dos horas, informé <strong>de</strong> ella <strong>de</strong>talladamente al señor<br />
<strong>de</strong>legado <strong>de</strong> Barcelona <strong>de</strong> los términos en que el diálogo sostenido con el embajador se<br />
había <strong>de</strong>sarrollado y <strong>de</strong>l resultado conseguido. Empecé por exponer, en los mismos