Cristianismo en crisis - Luz para las Naciones Internacional
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<strong>Cristianismo</strong><br />
<strong>en</strong><br />
• •<br />
crISIS<br />
A =Amén<br />
Nnguna relación puede florecer sin una constante y<br />
sincera comunicación. Esto es cierto, no solam<strong>en</strong>te <strong>en</strong> <strong>las</strong><br />
relaciones humanas; pero también <strong>en</strong> nuestra relación con<br />
Dios. Si de veras queremos fortalecer nuestra comunión con<br />
el Salvador, t<strong>en</strong>emos que mant<strong>en</strong>er un contacto perman<strong>en</strong>te<br />
con El. La manera de hacerlo es por medio de la oración.<br />
"A" repres<strong>en</strong>ta la palabra "AMEN". Tradicionalm<strong>en</strong>te la<br />
palabra "amén" se pronuncia al final de cada oración, y la<br />
oración es nuestro camino primero <strong>para</strong> comunicarnos con<br />
Dios.<br />
Amén es una palabra universalm<strong>en</strong>te reconocida cuyo<br />
significado es mucho más importante que una simple fórmula<br />
<strong>para</strong> despedir una oración implicando: "[Eso es todo!" Con la<br />
palabra "amén", nosotros, <strong>en</strong> efecto, lo que estamos tratando<br />
de decir es: "Que esta oración pueda estar de acuerdo con la<br />
voluntad de Dios". Es muy significativo que el apóstol Juan<br />
vio a Jesús como la personificación misma de la palabra<br />
"Amén": "He aquí el Amén, el testigo fiel y verdadero, el<br />
principio de la creación de Dios" (Apocalipsis 3:14).<br />
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