joshua-harris-le-dije-adios-a-las-citas-amorosas
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Le <strong>dije</strong> adiós a <strong>las</strong> <strong>citas</strong> <strong>amorosas</strong><br />
tipo de pregunta puede animarnos a desarrollar una perspectiva personal equilibrada<br />
sobre el matrimonio.<br />
En mi caso, la próxima vez que un grupo de mis amigos varones comiencen a discutir<br />
el tema del matrimonio, sencillamente como la oportunidad de tener relaciones<br />
sexua<strong>le</strong>s, yo puedo, una vez que haya ajustado mi propia actitud al respecto, retar su<br />
inmadura y limitada perspectiva. Aunque soy soltero, me puedo ayudar a mí mismo y<br />
a otros solteros, a desarrollar una perspectiva más alta de lo que es el matrimonio al<br />
rechazar <strong>las</strong> actitudes y <strong>las</strong> palabras que desestiman o reducen el matrimonio del lugar<br />
de honor que Dios <strong>le</strong> ha otorgado.<br />
¿De qué manera tú puedes animar a otros a que tangan el matrimonio en alta estima?<br />
El crisol del matrimonio<br />
El último consejo en la exposición de los Ricucci merece toda nuestra atención:<br />
El matrimonio es un proceso purificador. Los conflictos sucederán en todos los<br />
matrimonios. Cuando hay algún prob<strong>le</strong>ma entre ambos cónyuges, es muy fácil<br />
echar<strong>le</strong> la culpa al otro. ¡Si tan solo dejaras el aire acondicionado cuando la<br />
temperatura sube de esta manera, yo no me tendría que enojar tanto! El hecho es que<br />
tu cónyuge no es el responsab<strong>le</strong> por tu pecado, simp<strong>le</strong>mente estas revelando lo que<br />
hay en tu corazón. El mejor regalo de bodas que Dios te puede dar es un espejo<br />
llamado ―tu cónyuge‖. Si Dios <strong>le</strong> fuera a añadir una tarjeta al regalo, la misma diría:<br />
―Este regalo es para que descubras quien eres verdaderamente. ¡Felicidades!‖<br />
A la distancia, los solteros perciben el destello de la vida matrimonial, y solo piensan<br />
en el calor que <strong>le</strong>s hará sentir. Y de muchas maneras así será. Pero no se nos olvida<br />
que Dios desea que usemos el fuego del matrimonio no solo para que disfrutemos de<br />
su comodidad, sino para que también seamos purificados y limpiados de nuestro<br />
egoísmo y pecado. Nos acercamos al fuego del matrimonio para ca<strong>le</strong>ntarnos <strong>las</strong><br />
manos ¡Dios desea que nos echarnos en el fuego!<br />
No quiero dar la idea de que el matrimonio es todo dolor e incomodidad; pero<br />
tampoco éxtasis de p<strong>le</strong>nitud personal. Si no nos damos cuenta de esto a tiempo,<br />
nuestro matrimonio resultará ser extremadamente incomodo. En su libro The<br />
Mystery Of Marriage (―el misterio del matrimonio‖), el autor Mike Mason escribe lo<br />
siguiente: ―El matrimonio santo, al igual que <strong>las</strong> demás ordenes santas, nunca fue<br />
estab<strong>le</strong>cido como una posición cómoda para la gente vaga. Al contrario, es un<br />
programa sistematizado de sacrificio personal deliberado y a fondo… en realidad el<br />
matrimonio es un curso de acción bastante drástico… es un paso radical que no ha<br />
sido diseñado para nadie que no esté preparado, y verdaderamente ilusionado por<br />
rendir su voluntad y someterse de todo corazón a la voluntad de otro‖.<br />
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