03.10.2012 Views

joshua-harris-le-dije-adios-a-las-citas-amorosas

joshua-harris-le-dije-adios-a-las-citas-amorosas

joshua-harris-le-dije-adios-a-las-citas-amorosas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

CAPÍTULO DIECISEIS<br />

Algún día tendré<br />

una historia que contar<br />

escribiendo una historia de amor de la cual<br />

te sentirás orgulloso.<br />

Le <strong>dije</strong> adiós a <strong>las</strong> <strong>citas</strong> <strong>amorosas</strong><br />

N<br />

o hay nada más romántico que escuchar un relato honesto y comp<strong>le</strong>to de la<br />

historia de amor de una pareja.<br />

Serás uno de los privi<strong>le</strong>giados cuando tengas la oportunidad de escuchar esta<br />

historia de los labios de tus padres.<br />

Yo crecí escuchando como fue que mis padres se conocieron y se casaron. Las fotos<br />

de la familia me han servido de ayuda visual, porque me permitieron ―ver‖ cómo<br />

eran mamá y papá cuando se conocieron por primera vez. En mi mente, me<br />

transporto a aquellos momentos donde observo en si<strong>le</strong>ncio esa situación tan<br />

especial…<br />

―la ciudad de Dayton, en el estado de Ohio, no es el sitio más apropiado para un<br />

fogoso romance. A papá <strong>le</strong> gusta señalar que Dayton fue el lugar que vio nacer el<br />

avión y el motor de encendido automático, decía el bromeando, que te ayudaban a<br />

salir del pueblo deprisa.<br />

Pero, a pesar de los chistes y comentarios humorísticos de mi padre, este pueblo<br />

sirvió como escena para la historia de amor de mis padres, en el año de 1973.<br />

Al transportarme ―en el túnel del tiempo, al año de 1973, decido visitar la ig<strong>le</strong>sia a la<br />

cual mis padres asistían. La primera Ig<strong>le</strong>sia Bautista estaba ubicada en la esquina de<br />

<strong>las</strong> cal<strong>le</strong>s Map<strong>le</strong> y Ridgeway, y estaba compuesta por una mezcla de la antigua<br />

tradición y jóvenes de la nueva generación, un grupo de presuntuosos revoltosos<br />

denominados ―la gente de Jesús‖ de los cua<strong>le</strong>s forman parte mis padres. Encuentro<br />

un asiento en el café localizado en el sótano de una antigua casa al lado de la ig<strong>le</strong>sia<br />

―La roca‖ como la llamaban, estaba l<strong>le</strong>no de estudiantes de la escuela superior y un<br />

joven con pantalones ―vaqueros‖ y una camiseta desteñida estaba sentado en una<br />

silla cantando y tocando la guitarra. Ese joven es mi padre.<br />

Su cabello es largo y revuelto. No puedo dejar de sonreír al ver lo flaco que está. Y<br />

por supuesto tenía su bigote. ―hay cosas que nunca cambian‖, pensé.<br />

La canción que entona es simp<strong>le</strong> pero apasionada.<br />

En el futuro <strong>le</strong> pondrá como título ―tres acorde y la verdad‖. Ya había escuchado<br />

esta canción antes pero era un hombre mayor el que la cantaba, por nostalgia, y<br />

haciendo frecuentes interrupciones para preguntar: ―¿Cómo dice la próxima línea?<br />

Pero al escucharla en labios de alguien de mi misma edad me llamaba la atención.<br />

154

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!