Revista nº 22 - Plan alfa

El Corrector regía con la voz (que debía ser potente) y la mano al coro,
siendo imprescindible para el correcto ejercicio de este empleo la autoridad,
tanto musical como moral. Varios son los autores que coinciden en estos
aspectos, pero destacamos el caso de un Corrector que, al parecer, creó
escuela. Se trata de fr. Bartolomé de Santiago (ca.1561-1630), el cual usaba
de una técnica especial consistente en anticiparse al coro para conseguir que
éste entrara con precisión. Dice así el autor de las Memorias Sepulcrales:
“Fue Corrector del Canto muchos años, y continuos más de
veinte. La voz era de contralto que partía con tenor, lo que se
puede desear para decir una misa cantada, y para el coro bastante,
y más con la cordura que usaba della. Entraba medio pun -
to antes, previniendo el acierto, con que tenía menos que corregir,
y no parecía que había Corretor ni que era menester.” (MS,
p. 239)
Esta forma de dirigir el coro la exportó al Convento de San Pablo de
Valladolid, adonde fue requerido para adoctrinar a dicha comunidad en
los usos y prácticas del oficio divino escurialense, a raíz del entierro del
Duque de Lerma.
No siempre son loados los coros jerónimos, ya que existen ciertos testimonios
de viajeros y observadores cualificados que consideran excesivamente
pausados los cantos jerónimos y de una sonoridad excesivamente
fuerte, en detrimento de la inteligibilidad del texto.
Con la introducción de la polifonía (llamada antiguamente “canto de
órgano”) en los monasterios jerónimos a partir del s. XVI, se observan ciertas
novedades en las prácticas musicales. Surge un pequeño grupo de cantores
e instrumentistas que se especializa en el estilo polifónico. Este
grupo recibe el nombre de Capilla de Música y está dirigido por el Maes -
tro de Capilla. De las funciones de la Capilla y su Maestro nos habla fr.
Martín de la Vera en su “Instrucción de eclesiásticos”. Nótese las advertencias
que hace con respecto al Corrector del Canto, diferenciando claramente
un oficio de otro, aunque en ocasiones pudieran recaer ambos en la
misma persona:
“Del canto de órgano se usa en nuestros coros en las fiestas
precipuas, y se permite echar contrapunto en los mismos días, y
cantar en fabordón, todo a disposición del Prior. Ha de haber su
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