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L - Saber Alternativo

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28<br />

SABER ALTERNATIVO<br />

SALUD<br />

Aguacate. Contiene ácidos grasos<br />

Frutos secos. Las nueces y las<br />

almendras especialmente, contienen ácidos grasos insaturados.<br />

Manzana. Contiene pectina que ayuda a la disminución del<br />

colesterol.<br />

Pomelo. Contiene ácido galacturonico que ayuda a la eliminación<br />

del colesterol<br />

Cebolla. Contiene aceites esenciales ricos en compuestos<br />

azufrados.<br />

Berenjena. Ayuda a eliminar las grasas ingeridas. Dejar en<br />

maceración 24 horas una berenjena en ? litro de agua y beber<br />

el agua. Tres vasos al día.<br />

Alcachofa. Actúa como antitóxico hepático y evita<br />

la acumulación del colesterol, actuando en su eliminación.<br />

Ajo. Contiene alicina, que reduce la agregación<br />

plaquetaria.<br />

Yogurt. Parece ser que la bacteria que se utiliza<br />

para que el yogurt fermente puede ser la<br />

responsable de que disminuya el colesterol sanguíneo<br />

al bloquear su elaboración en el hígado.<br />

Aceites de 1ª presión en frío. Contienen grasas insaturadas,<br />

especialmente el de soja.<br />

Caballa, arenque y sardinas. Contienen grasas que favorecen<br />

la bajada del colesterol.<br />

2º Realizar ejercicio físicos<br />

3º Practicar yoga y meditación para reducir el estrés.<br />

4º Suplementos:<br />

-Fitoterapia: Alcachofera, boldo, fumaria y alpiste.<br />

-Vitaminas: Complejo B, especialmente B3,B5 y B6, vitaminas<br />

E y C.<br />

-Colina e inositol<br />

-Aminoácidos: L-carnitina<br />

-Acidos grasos: Omega 3<br />

-Minerales: Cromo y magnesio.<br />

-Lecitina.<br />

Loly Picallo<br />

Naturópata - Kinesiologa<br />

El insomnio, un mal<br />

de nuestro tiempo<br />

RISTÓTELES consideraba el sueño como un mecanismo de recuperación<br />

A<br />

física pero hoy sabemos que el sueño no es solo un simple mecanismo<br />

de recuperación físico - psíquica, sino que es un estado activo y organizado<br />

que tiene un impacto muy importante sobre muchos aspectos tanto<br />

fisiológicos como del comportamiento. Por tanto podemos pensar que el sueño es un<br />

proceso dinámico en el que nuestro cerebro se mantiene activo y es esencial para el<br />

funcionamiento normal de todos los sistemas del organismo incluyendo el sistema<br />

autoinmune.<br />

Recientes estudios de investigación concluyen que aquellas personas que duermen<br />

habitualmente mal, tienen hasta 5 años menos de perspectivas de vida.<br />

El sueño es, por tanto, un estado complejo, pero fundamental para la vida y que el<br />

hecho de dormir es una forma de comportamiento como el beber, comer o socializar.<br />

Es una forma de “apagar” para procesar, consolidar... toda la información recuerdos...<br />

según procedimientos todavía desconocidos para la ciencia, pero tal vez imposibles de<br />

realizar en estado de vigilia. Y si no puede darse este proceso, nuestro organismo<br />

empieza a sufrir las consecuencias. Esto es lo que sucede en los casos de insomnio<br />

sea o no inducido. Sabemos que aquellas personas que duermen mal son menos eficientes<br />

en el trabajo, más peligrosas al volante, poco propensas a socializar, más vulnerables<br />

a las enfermedades y en general tienen peor calidad de vida.<br />

Y aunque son múltiples los trastornos del sueño, sin duda el más común es el insomnio.<br />

Y dentro de este síntoma, porque no es una enfermedad, podemos diferenciar<br />

dos clases, el agudo y el crónico. Cuando los trastornos del sueño se concentran en<br />

un periodo que va de un día a pocas semanas, hablamos de una fase agua y cuando<br />

se prolonga varios meses se habla entonces de un insomnio crónico.<br />

Son muchas las causas que pueden llevar a un estado de insomnio. Pero podemos<br />

resumirlas en físicas y psicológicas. Y entre las primeras conviene destacar las sustancias<br />

xenobióticas como el café, alcohol o nicotina y la mala higiene del<br />

sueño o malas costumbres. Y ente las causas psicológicas cabe destacar el estrés,<br />

exceso de emotividad los estados de ansiedad, la fobia del sueño o el miedo<br />

al propio insomnio.<br />

Estas y otras son causa de un sueño fragmentado, en el que se interrumpen las<br />

fases y los ritmos y que dan como resultado, en el mejor de los casos un sueño poco<br />

o nada reparador.<br />

Es muy importante determinar la causa primaria tanto física como psicológica ya que<br />

nos va a permitir asociar el tratamiento sintomático con la búsqueda de las causas<br />

primarias que nos ha de llevar a un tratamiento definitivo.<br />

Para poder elaborar un tratamiento natural, integral y con garantía de éxito es necesario<br />

saber y tener en cuenta que el insomnio tiene a menudo una etiología multifactorial<br />

y por tanto requiere intervenciones múltiples. De todos modos las pautas<br />

sintomáticas son esenciales al principio, porque el sueño representa por si mismo<br />

un importante recurso de recuperación para el organismo, por lo que si esta no se<br />

diera, cualquier otro tratamiento de fondo estaría destinado al fracaso. El concepto<br />

de favorecer un sueño reparador es fundamental en cualquier tratamiento natural.<br />

Antes de entrar en el tratamiento integral para combatir el insomnio es bueno conocer<br />

la importancia de las sustancias xenobióticas en los factores del dueño.<br />

La cafeína en todas sus formas, es, sin duda la de más consumo en el mundo. Se<br />

supone que el 75% de la población la consume a diario para despertar en alguna<br />

de sus presentaciones (café, té, bebidas de coca, chocolate...). Sabemos por multitud<br />

de estudios que la cafeína potencia la atención, pero reduce la duración del

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