Introducción - Editorial Sal Terrae
Introducción - Editorial Sal Terrae
Introducción - Editorial Sal Terrae
- No tags were found...
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
PrólogoEl libro del padre Cencini concierne a la fe cristiana en distintosniveles e interpela al teólogo y al psicólogo: el teólogo tiene quedesarrollar la implicación del principio cristológico de la encarnación:la carne es el quicio de la salvación 1 ; y el psicólogo (creyente)tiene la tarea de recordar que la psique y la carne no puedenser salvadas sin el Espíritu de Dios 2 . Tenemos, pues, las doscaras del desafío de la virginidad: la llamada a encarnar el amor,para que el mundo crea; pero el mundo tiene que creer en elEspíritu y no en la carne.La salvación cristiana es esto: creer en el amor y vivir la salvacióncomo amor. Por eso es importante recordar que lo que hayde específicamente cristiano en la virginidad no es el hecho de quesea una virtud ascética, como la han practicado otras religiones yescuelas filosóficas, sino la naturaleza del amor que quiere testimoniary anunciar, un amor que es «memoria de los orígenes yprofecía del futuro», como dice el padre Amedeo (cap. 2).En otras palabras: la vocación cristiana es «de la persona a lacomunión» en el sacrificio del egoísmo, que sólo puede ser vencidopor la fuerza del amor. La comunión, a su vez, es el fruto deldescenso del Espíritu Santo, que crea unos cielos nuevos y una tierranueva en un cuerpo renovado a imagen del Resucitado. De estemodo, al consagrado se le pide que rinda cuentas del sentido desu elección y de su promesa de virginidad en el marco de una lla-1. TERTULIANO, De resurrectione carnis VIII: PL 2,806.2. Cf. IRENEO DE LYON, Adversus haereses V, 9, 3.