Introducción - Editorial Sal Terrae

28VIRGINIDAD Y CELIBATO, HOYrazón, con toda la mente y con toda la voluntad; la criatura es queridacon el corazón y la libertad de Dios, que es la plenitud y totalidaddel amor. Pero lo interesante es que se trata de una totalidadentrecruzada en referencia al objeto, en el sentido de que el objetodivino, Dios, es amado con corazón y por un corazón totalmentehumano, mientras que la criatura humana es querida con benevolenciadivina, o siempre por un corazón de carne pero educadopor la libertad de Dios para amar con su longitud, altura, intensidad...Es obvia la relación entre los dos amores: el uno influye enel otro inevitablemente.Por eso el amor del virgen es un amor pleno, por el objetoamado y por la modalidad amante, totalmente humano y, no obstante,divino, como totalmente humano y totalmente divino es elCristo sufriente en la cruz, culmen extremo del amor virgen y dela totalidad de tal amor: al Padre, amado por encima de todo, y alhombre, alejado de Dios por el pecado y que, por tanto, no se consideraamable y siente la tentación de no sentirse amado.1.4. Condición: la renunciaCualquier elección implica una renuncia, como una condición(= condición en negativo) directamente ligada a aquella elección.La renuncia intencional del virgen consiste en renunciar a vínculosdefinitivos y exclusivos, con carácter totalizador, como serían,por ejemplo, el matrimonio o una relación demasiado avasalladoray posesiva, exclusiva y excluyente. Pero no se trata sólo de esto,pues esto es sabido y se suele dar por supuesto, mientras queno se subraya suficientemente la otra vertiente de la elección. Elvirgen elige también no excluir a nadie; en conclusión, renuncia aamar con los criterios de la benevolencia o simpatía sólo humana–que prefiere a una persona o excluye a otra basándose en el simpleinstinto o en la espontánea atracción o en el interés personalmás que en el de la otra persona.Uniendo los dos últimos subrayados (las condiciones en positivoy en negativo) decimos que el/la consagrado/a virgen tieneque vivir muchas relaciones, pero con un estilo particular, que reflejede forma clara su virginidad, y exprese al mismo tiempo lacentralidad de su relación con Dios y la pasión por todo hermano