CATE Q U E TICA - Editorial Sal Terrae

323vive hoy la familia le hace incapaz deeducar en valores y llevar a cabo eldespertar religioso. Muchos padres,aún creyentes, encuentran dificultadespara educar a sus hijos en unclima religioso familiar. Esta situaciónplantea la necesidad de prestar unaatención especial a la familia e integrarlaen el proceso educativo de sushijos.• El magisterio de laIglesia ha publicadomagníficos documentosqueaportan abundantessugerenciasy líneasde acción parala pastoral catequética.Sinembargo se constataque, muchasveces, no son suficientementeconocidosy estudiados nitratan de aplicarse a la realidadconcreta para que lapraxis catequética se vaya desarrollandosegún esas orientaciones de laIglesia y se logre una auténtica renovaciónde la tarea de educar en la fe.II.- CONSTATACIONES• Estamos viviendo un tiempo privilegiado,un momento histórico en lapastoral de la Iglesia. No debemossituarnos ante él con miedo ni conpesimismo. Es necesario asumirlocomo un reto y saber descubrir las llamadasque el Espíritu hace a través detoda esta situación. Hay que ser conscientede todo lo positivo que hay enlas personas y en el mundo, sabiendoaprovechar las inmensas posibilidadesque puede haber para la iniciacióna la fe de nuevos creyentes y larevitalización de los que, por múltiplescircunstancias, se han alejado deella.• Durante los últimos años han sidomuchas las personas(obispos, sacerdotes,religiosos/as y catequistas)que sehan entregadocon ánimo e ilusióna la tareacatequética. Songrandes losesfuerzos realizadospara llevar acabo la tarea deanunciar elevangelio deJesús en la sociedadactual. Esnecesario reconocery agradecer esetrabajo, muchas vecessilencioso, que, en nombre de laIglesia, se está realizando en lasparroquias y grupos cristianos.• La situación actual plantea la necesidadde realizar una profunda reflexiónpara procurar encontrar lamejor respuesta de educación en lafe en medio de la sociedad. Unareflexión basada en el diálogo entretodos los implicados en esta tarea yque tenga como orientación: los signosde los tiempos, los documentosde la Iglesia y la voz del Espíritu.CATEQ U ET I C A