Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Sonia García López<br />
gente de identificarte con alguien, de lo que a ellos les deslumbra.<br />
Era algo impresionante.<br />
¿Cómo recuerdas <strong>la</strong> experiencia durante el festival?<br />
Fue muy gracioso, porque no vi una so<strong>la</strong> pelícu<strong>la</strong>, ni <strong>la</strong> mía ni<br />
ninguna. Yo preguntaba: no había manera. Me parece increíble, pero<br />
ni siquiera asistí a <strong>la</strong> proyección Cristo. No sé, igual no se proyectó.<br />
No había nadie que te informara. Ir a un festival y volverte no habiendo<br />
visto una pelícu<strong>la</strong> era deso<strong>la</strong>dor. Creo que nadie vio ninguna,<br />
porque no se sabía cuándo <strong>la</strong>s ponían.<br />
Entonces, ¿qué hacías cada día?<br />
Íbamos a Mar del P<strong>la</strong>ta a bañarnos, y luego a correr por acá y por<br />
allá: cenas, presentaciones... una locura; una locura a lo argentino.<br />
Era todo un corre-corre, un evento detrás de otro. <strong>El</strong> cine no tenía<br />
nada, pero nada que ver con aquel festival. Iban llegando los aviones,<br />
los Mercedes... le costó una fortuna a Argentina, pero entonces<br />
todo era así. Creo que decidieron que daba igual, que allí de lo que<br />
se trataba era de hacerle propaganda a Perón y a <strong>la</strong> obra de Perón y<br />
Evita, tal era <strong>la</strong> concatenación de acontecimientos re<strong>la</strong>cionados con<br />
Perón que nos llevaba aquí y allá. Un día nos condujeron a una de<br />
<strong>la</strong>s escue<strong>la</strong>s para mujeres jóvenes que Eva Perón había fundado. Recuerdo<br />
<strong>la</strong> estampa de <strong>la</strong>s alumnas de aquel sitio, todas aquel<strong>la</strong>s chicas<br />
jovencitas sentadas formando un semicírculo en torno a Perón.<br />
Una de el<strong>la</strong>s se apoyaba en su hombro mientras otra reclinaba <strong>la</strong> cabeza<br />
en sus rodil<strong>la</strong>s. Era un espectáculo increíble. Y él allí como un<br />
sultán, hablándonos de Eva y toda <strong>la</strong> historia, y Evita por aquí y<br />
Evita por allá. Otro día, llegamos a <strong>la</strong>s habitaciones del hotel, que<br />
era todo lujo, y, al entrar cada uno en su cuarto, nos encontramos<br />
con algo muy divertido: una fotografía de Perón, firmada de su puño<br />
y letra. Nos <strong>la</strong> había dedicado a todas, una por una: a Margarita Alexandre,<br />
a Aurora Bautista, a no-sé-quién... “de su amigo entrañable<br />
Juan Perón”. Fíjate que fueron americanos, europeos... pues a todos<br />
nos dejó <strong>la</strong> foto con su nombre y dedicatoria. Al ver <strong>la</strong>s fotografías,<br />
todos corríamos por el pasillo riéndonos: Oye ¿y a ti también te ha<br />
33