libro EMERGENCIAS PRÁCTICAS EN SALUD dr paz abril 2016-1

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CAPÍTULO
INCAPACIDAD DE TRANSPORTEDE OXÍGENO POR LA SANGRE
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La es el ejemplo principal de asfixia por incapacidad de transporte de oxígeno por la sangre. El
monóxido de carbono se combina rápidamente con algunas células corporales en forma tal, que
impide que la sangre transporte oxígeno. En esta forma, las células del cuerpo humano
[especialmente las del cerebro] sufren falta de oxígeno, lo que causa su muerte. El monóxido de
carbono es un gas incoloro, inodoro e insípido, y su presencia en el aire puede pasar inadvertida.
Concentraciones pequeñas del mismo pueden ser muy peligrosas.
Hay monóxido de carbono en los gases de expulsión de los motores, gases elaborados para cocina y
calefacción, gases de albañil, gases empleados en procesos industriales o que resultan de los mismos
u otros gases. Se produce en la combustión de algunas substancias, v. gr.; carbón mineral, coke,
aceite y gasolina.
También es producido por la descomposición; por ejemplo, la descomposición de alimentos en la
bodega de un barco puede producir suficiente monóxido de carbono para intoxicar a cualquier
persona que entre en ella. La intoxicación por monóxido de carbono es causa frecuente de asfixia.
Parálisis del centro respiratorio del cerebro
La respiración también puede interrumpir si se paraliza el centro respiratorio del cerebro. Las causas
más frecuentes de parálisis del centro respiratorio son choque eléctrico, cantidades excesivas de
alcohol, fármacos o anestésicos, e inspiración de gran cantidad de bióxido de carbono. También,
algunos solventes bastantes empleados; v. gr.; tetracloruro, alteran el centro respiratorio y causan
interrupción de la respiración.
Composición del cuerpo
Es muy difícil hacer los movimientos respiratorios del tórax en oposición a un gran grado de presión,
y por ello la compresión del cuerpo puede interrumpir fácilmente la respiración.