05.02.2018 Views

Muy_Interesante_USA_2014-05

Muy interesante es una revista mensual de divulgación y ciencia popular, creada y publicada por el Grupo G+J España. Sus contenidos abarcan desde las ciencias biomédicas, la tecnología y la astrofísica; hasta la psicología, la prospectiva y la historia. La publicación se caracteriza por la variedad visual, fotográfica e infográfica, así como por un estilo periodístico y divulgativo accesible a cualquier lector. Sus lemas son "La revista para saber más de todo" y "Muy interesante: entretenimiento inteligente

Muy interesante es una revista mensual de divulgación y ciencia popular, creada y publicada por el Grupo G+J España.

Sus contenidos abarcan desde las ciencias biomédicas, la tecnología y la astrofísica; hasta la psicología, la prospectiva y la historia.

La publicación se caracteriza por la variedad visual, fotográfica e infográfica, así como por un estilo periodístico y divulgativo accesible a cualquier lector. Sus lemas son "La revista para saber más de todo" y "Muy interesante: entretenimiento inteligente

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

FOTOS: JAN BARTH; INFOVATICANA<br />

Biblioteca Universal<br />

Sin duda se trata de la de Alejandría, fundada alrededor del año 300 antes de<br />

nuestra era. Cuando el rey Ptolomeo I de Egipto preguntó a Demetrio de Falero,<br />

responsable de la gran biblioteca, “¿cuántos pergaminos tenemos?” , éste<br />

sugirió hacer un recinto universal que contuviera todos y cada uno de los libros que<br />

hasta entonces había en el mundo. Ptolomeo y sus sucesores estuvieron interesados<br />

en comprender a los pueblos bajo su gobierno así como conservar obras budistas, latinas,<br />

persas, hebreas y egipcias traducidas al griego. La biblioteca llegó a albergar alrededor<br />

de 750,000 manuscritos, muchos de ellos copias o duplicados, pues en aquel<br />

entonces no había esa cantidad de obras originales en todo el orbe. Los libros no tenían<br />

el mismo aspecto que ahora; muchos de ellos eran rollos de papiro o pergaminos (de<br />

Pérgamo, ciudad en la actual Turquía donde se preparaban las pieles para escribir) con<br />

una etiqueta de madera que ostentaba el título, y guardados en pequeños casilleros.<br />

La biblioteca fue destruida por incendios y hurtos.<br />

venado, sobre los que los tlacuilos o pintores-escribanos<br />

plasmaron hechos diversos.<br />

Tales manuscritos fueron depositados<br />

en sitios especiales llamados amoxcalli,<br />

para asegurar su conservación. Los más<br />

conocidos son los de Texcoco y Tlatelolco,<br />

aunque todos ellos fueron destruidos durante<br />

la conquista española.<br />

Pérgamo<br />

Rival de la Biblioteca de Alejandría, se dice<br />

que en este lugar comenzaron a crearse<br />

los primeros pergaminos, dada la prohibición<br />

del faraón Ptolomeo Filadelfo que<br />

impedía exportar papiros de Egipto. Los<br />

pergaminos, pieles procesadas de algunos<br />

animales, resultaron ser más duraderos<br />

que el papiro, lo que representó un avance<br />

considerable en la historia de la difusión<br />

del conocimiento. Junto con todo el reino<br />

de Pérgamo, la biblioteca fue legada al<br />

pueblo romano en el año 133 a. C. Se rumora<br />

que Marco Antonio entregó a Cleopatra<br />

la profusa colección de 20,000 obras de<br />

este recinto para reemplazar y recuperar<br />

las pérdidas de la Biblioteca de Alejandría.<br />

Fuentes: britannica.com; history-magazine.com<br />

<br />

Monasterios<br />

Los libros se convirtieron en un elemento<br />

esencial en el desarrollo de la vida<br />

espiritual. Para la orden de los benedictinos,<br />

el estudio y la lectura fueron<br />

actividades fundamentales de todo monástico.<br />

Rasgo característico de los monasterios<br />

fueron los recintos donde se<br />

copiaban los manuscritos para asegurar<br />

su preservación, específicamente los de<br />

la orden benedictina. Fue en estos sitios<br />

donde se inventó el conocido y recurrido<br />

préstamo interbibliotecario, pues<br />

los manuscritos podían prestarse de un<br />

monasterio a otro e incluso al público en<br />

general; en este sentido, fungieron como<br />

bibliotecas públicas, aunque hay que<br />

recordar que la lectura era una actividad<br />

reservada sólo a unos cuantos.<br />

Renacimiento bibliotecario<br />

Hacia 1400 algunos aristócratas comenzaron<br />

a formar sus propias colecciones<br />

de libros, conforme crecía el interés por<br />

conocer a los clásicos griegos y romanos.<br />

Cosme de Médici, fundador de la dinastía<br />

<br />

Era digital<br />

Las bibliotecas siempre han tenido<br />

que adaptarse a los soportes y<br />

tecnologías del momento, por ello<br />

así como hubo bibliotecas de tablillas<br />

de arcilla y rollos de papiro o pergamino,<br />

la difusión del Internet ha dado lugar a<br />

las bibliotecas digitales, que presentan<br />

contenidos en soportes electrónicos y<br />

digitales con acceso en línea. Pueden<br />

estar integradas por libros, manuscritos,<br />

revistas, archivos sonoros, cartas, dibujos,<br />

videos, mapas y fotografías.<br />

de los Médici durante el Renacimiento<br />

italiano, reunió su propia colección que<br />

dio origen a la Biblioteca Laurenciana,<br />

una de las más importantes de Florencia<br />

e Italia y famosa por conservar alrededor<br />

de 11,000 manuscritos. La imprenta<br />

de Gutemberg cambió por completo el<br />

panaroma, pues los libros, colocados en<br />

libreros y estantes abiertos, reemplazaron<br />

a los manuscritos.<br />

De lo privado a lo nacional<br />

Surgieron en Europa y en Norteamérica<br />

a partir de ciertas colecciones privadas<br />

reunidas, en ocasiones, con el único afán<br />

de la ostentación, aunque muchas de<br />

ellas nacieron de un interés genuino por<br />

los libros y el conocimiento. Un ejemplo<br />

es la Biblioteca Nacional de Francia, que<br />

empezó en 1367 como la biblioteca real<br />

de Carlos V. Las colecciones de Sir Hans<br />

Sloane, Sir Robert Cotton y Edward y Robert<br />

Harley, condes de Oxford, conformaron<br />

la base de la colección del Museo<br />

Británico en 1753, enriquecida en 1757<br />

con la adición de los libros de la Biblioteca<br />

Real, que contenía obras reunidas por<br />

los reyes británicos.<br />

muyinteresante.com.mx 27

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!