Revista Cuadernos de Logística [C de Comunicación] - Número 52. Octubre 2019

dicho almacén, que supongan un esfuerzo
para las personas sean paulatinamente
sustituidas por tareas que realice una
máquina, y que la persona se centre en todo
lo que pueda crear valor. La mano de
obra, si no aporta valor a los procesos, es
un gasto innecesario. El uso de carretillas
elevadoras inteligentes autónomas permite
a los almacenes operar las 24 horas del
día, sin interrupción. La participación humana
queda supeditada a tareas más estratégicas
que de esfuerzo, con lo que podrán
generar una mayor eficiencia de las
operaciones. Por lo tanto, con la incorporación
del Internet de las Cosas, aseguraremos
un mejor margen vía el aumento de
eficiencia en nuestras operaciones.
Qué buscamos en las carretillas “Smart”
Los móviles son “Smart”, los coches
son “Smart”, en definitiva, la logística es
“Smart”, por lo que las carretillas también
tienen que ser inteligentes. Para ello nos
planteamos que tenemos que pedirle a
una carretilla inteligente hoy en día. Estamos
hablando de una carretilla que a través
del sistema de información esté correctamente
integrada con el sistema de
gestión de almacén (SGA) y el de control
(SCA – Sistema de Control de Almacén)
de una compañía.
El primer punto sería que se comunique
de manera automática con el SGA para
que este advierta cuando el vehículo necesita
servicio o reparación.
En las áreas del almacén con un tráfico
peatonal denso, las velocidades pueden
ser limitadas para evitar daños personales.
Se pueden programar para que la conducción
se adapte a las circunstancias de los
recorridos que deban realizar. También se
les puede incorporar tecnología antideslizante,
que mejore de manera automática
la tracción en suelos resbaladizos para
evitar colisiones.
Es un elemento que está en continuo movimiento,
por lo que tiene la capacidad de
detectar peligros potenciales en el almacén.
Esta detección evitará colisiones que
podrían lesionar a los trabajadores y dañar
el equipo y el inventario.
Como elemento de manutención, una de
sus funciones es la de subir, colocar y bajar
los materiales. Una carretilla inteligente
podrá hacer este movimiento
de las horquillas
del elevador mucho
más rápido y con mayor
seguridad que un conductor.
Internet de las cosas,
hace que el flujo
de información del
almacén y su entorno
a la carretilla haya
crecido de manera
exponencial
Además, también mejoraremos
las lesiones de
espaldas de las personas
que están manipulando
los materiales en
los elevadores. Pongamos
por ejemplo que se
requiere completar un pedido con un productor
determinado. El sistema de gestión
del almacén envía una señal a una carretilla
elevadora inteligente diciéndole que vaya
a un lugar de recogida para obtener un
artículo en cuestión. El mensaje que recibe
la carretilla, le indica además a qué altura
está el estante en el que se almacena
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