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El Informe Nacional sobre Desarrollo Humano
(INDH) 2011, ofrece una mirada analítica y
reflexiva sobre la inequidad, uno de los grandes
desafíos que enfrenta la sociedad hondureña para
lograr mayores niveles de desarrollo humano.
La inequidad es definida en este Informe como
aquellas desigualdades que se consideran injustas,
innecesarias y socialmente remediables.
El Informe concentra su reflexión en cuatro
dimensiones de la inequidad: la económica, social,
política y de acceso a la justicia. Asimismo,
se presenta un panorama del estado de situación
del desarrollo humano del país bajo un enfoque
de inequidad territorial.
Para el estudio analítico de estas dimensiones,
se emplean como ejes transversales, variables que
definen características objetivas de los grupos sociales:
nivel de ingresos, género, etnicidad, nivel
educativo y ámbito de residencia (urbano o rural).
El INDH 2011 también explora, desde el punto de
vista de la población, las ganancias que obtendría
el país si se redujeran las brechas de inequidad que
impiden mayores niveles de desarrollo humano en
el país. En la parte final, se propone la urgencia
de un pacto social entre los distintos sectores de la
sociedad hondureña para reducir la inequidad.
La lucha contra la inequidad y la construcción
de sociedades equitativas e incluyentes, es una de
las grandes aspiraciones del Sistema de Naciones
Unidas en general y del PNUD en particular.
De hecho, la equidad, junto a la eficiencia y la
libertad, constituyen las tres dimensiones claves
del paradigma del Desarrollo Humano. Como
ha señalado Amartya Sen, “la necesidad de lograr
la equidad es un elemento central dentro de la
perspectiva de la libertad en general, y en particular
de la idea del “desarrollo como libertad”” (Sen,
2002, pág.40).
Desde un enfoque de desarrollo humano, las
barreras que impiden que los individuos puedan
Prólogo
ejercer cualquiera de las libertades fundamentales
son injustas, innecesarias y socialmente evitables.
Entre las libertades fundamentales están, la
capacidad de vivir una vida saludable, adquirir
conocimientos, tener un nivel de vida digno, poder
participar en la vida de la comunidad o expresarse
libremente. La lucha contra la inequidad y el
diseño de políticas públicas sostenidas para reducirla,
es no solamente deseable, sino que tiene un
potencial liberador para el cambio social, cultural
y el desarrollo humano del país.
El INDH 2011, al igual que sus predecesores,
es el resultado de análisis independientes basados
en datos confiables. Se realizó un riguroso proceso
de investigación en el cual se empleó una metodología
altamente participativa e incluyente. Con el
valioso apoyo del Instituto Nacional de Estadísticas
(INE), se levantó la Primera Encuesta Nacional de
Percepción sobre Desarrollo Humano (ENPDH),
enfocada en los temas de inequidad y movilidad
intergeneracional, cuya muestra estuvo compuesta
por 3932 personas a nivel nacional. Se realizaron
16 grupos focales, en los que participó más de un
centenar de personas de distinta condición social
a nivel central y regional. Asimismo, se realizaron
estudios de caso y entrevistas a distintos tipos de
actores sociales. Se hizo uso de una amplia bibliografía
e investigaciones locales e internacionales.
En conjunto, estas acciones permitieron darle voz
a distintos sectores y captar la pluralidad de experiencias
vitales de los actores, así como profundizar e
ilustrar mejor los temas de estudio. El INDH 2011
contó también con la valiosa retroalimentación de
un Consejo Asesor a lo largo de todo el proceso de
elaboración, así como la lectura y comentarios de
lectores nacionales y de reconocidos profesionales
internacionales de la investigación en desarrollo
humano y aspectos socioeconómicos y políticos, a
quienes se le agradece profundamente su aporte.
Los hallazgos del INDH 2011 muestran que
REDUCIR LA INEQUIDAD: UN DESAFÍO IMPOSTERGABLE