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en pro de una distribución más equitativa de las
recaudaciones fiscales.
Las exenciones tributarias no son problemáticas
en sí mismas y son reconocidas como uno de los
instrumentos de política utilizados por los gobiernos
para obtener resultados específicos, tales como
incrementar la tasa de empleo en sectores claves
y atraer inversión extranjera. Por ejemplo, ciertas
empresas ubican su producción en una determinada
zona o región (Intel en Costa Rica por ejemplo),
y de esta manera, se incentiva una actividad
específica, comúnmente, las exportaciones.
De acuerdo con Perdomo y Díaz (2011 pág.
34), en su estudio patrocinado por el FOSDEH,
la era de las exoneraciones fiscales comenzó en
la década de los 60s, bajo el argumento de que
en aras de lograr la reconversión industrial, las
empresas nacionales y extranjeras que calificaran
en el régimen de industrias de la integración centroamericana,
serían estimuladas por medio del
no pago de impuestos. Sin embargo, según los
mismos autores, este tipo de política ha tenido
su lado contraproducente pues “los sectores de
mayores ingresos de la sociedad hondureña han
podido lograr la evasión legal del pago de impuesto
mediante leyes y “reformas tributarias” donde
se justifican tales concesiones para los fines de
promover la generación de empleo, obtención de
divisas y otros beneficios para el país” (Perdomo
y Díaz, 2011, pág. 45).
Otro estudio de FOSDEH (2011 pág. 8),
plantea que el “Estado practica una sobredimensionada
política de exoneraciones que impiden
una recaudación tributaria más equitativa, que
potencialice la capacidad económica del país, su
competitividad empresarial y disminuya los riesgos
fiscales para intentar desarrollar un adecuado
equilibrio macroeconómico y microeconómico”.
El mismo estudio señala que “hay aproximadamente
68 decretos de Ley y acuerdos emitidos por
el Congreso Nacional de la República y el Poder
Ejecutivo, manejados bajo secretividad por todos
los Gobiernos de Honduras que promueven las
exoneraciones fiscales”.
Las cantidades exoneradas son considerables.
En 2009, las exoneraciones fiscales anduvieron
por el orden de los 17 mil millones de Lempiras,
que representan un 6.5% del PIB (FOSDEH
2011 pág. 8). Esto significa que lo que se dejó de
cobrar, fue equivalente al 44% de los impuestos
tributarios recaudados ese año. 6
En el período 2001-2007, las exoneraciones
fiscales fueron estimadas en 40.9 mil millones de
Lempiras (ver cuadro 2.5), es decir, más del 50%
CUADRO 2.6: Honduras: matriz de exoneraciones
Concepto Renta Venta
Profesores X
Tercera edad X
Importación
1
Producción
y Consumo
Selectivo al
Consumo
Maquilas (RIT, ZOLI, ZOLT, ZADE) X X X X X
Minería X X X
Ley de Emisión del Pensamiento
(Estaciones de radio y televisión,
periódicos)
Ley de Turismo X X
Cuerpo Diplomático y Consular X X X
Generadores privados de energía
eléctrica
INEQUIDAD ECONÓMICA: AMPLIANDO LAS OPCIONES DE INGRESO Y ACCESO A ACTIVOS DE LOS MÁS DESVENTAJADOS
X
X X
Instituciones sin fines de lucro X X X
Organizaciones Privadas de
Desarrollo (OPD´s)
Organizaciones No
Gubernamentales (ONG´s)
X X X
X X X
Iglesia como institución X X X
Universidad Nacional Autónoma
de Honduras
X X X
Escuela Agrícola Panamericana X X X
Exportadores (RIT) X
Tiendas Libres X X X X
Industria Lechera X X
Empresa agrícola X
Convenios Internacionales X X X X X
Municipalidades X X X X X
Seguro Social X X X X X
Ley de Transporte X
Nota: 1. Impuesto de Importación incluye arancel, ventas, recargos, sobretasas, demás cargos que aparecen
en la póliza. X = Exonerado.
Fuente: FOSDEH (2011).
del presupuesto aprobado para la administración
central el 2011. El 57% de ese monto corresponde
a impuestos aduaneros, principalmente derechos
arancelarios e impuestos sobre ventas (L. 23.2
mil millones). El restante 43% corresponde a
impuestos tributarios, donde van incluidos activos
netos (L. 5 mil millones), ISR (L. 4.1 mil millones)
y el ISV y el aporte vial (L. 3 mil millones
cada uno).
Para tener una idea aproximada de si al exonerar
esta cantidad de dinero en impuestos se contribuyó
al logro de los objetivos que pretende una
política de exoneración fiscal, se han explorado
las tendencias de indicadores claves en el período
2001-2007 (ver gráfico 2.30). Se observa que
hubo un incremento de la inversión extranjera
directa en el período, la que pasó de 301.4 a 926.1
millones de US$, estimulado en parte por las
políticas de exoneración fiscal. Sin embargo, este
incremento en la inversión extranjera, parece no
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