UwEbF6
UwEbF6
UwEbF6
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
82<br />
nas para alcanzar una vida sana sin enfermedades<br />
y sufrimientos evitables ni mortalidad prematura”<br />
(Sen, 2002b, pág. 303).<br />
Desde una perspectiva de equidad, “la salud es<br />
un factor decisivo para el bienestar de las personas,<br />
las familias y las comunidades y, a la vez, un<br />
requisito para el desarrollo con equidad. Más aún,<br />
las personas tienen derecho a un cuidado equitativo,<br />
eficiente y atento de su salud y la sociedad<br />
en su conjunto debe garantizar que nadie quede<br />
excluido del acceso a los servicios de salud y que<br />
estos proporcionen una atención de calidad para<br />
todos los usuarios” (Arriagada, Aranda, y Miranda,<br />
2006, pág. 7).<br />
Como es conocido, la educación y salud son<br />
elementos constitutivos del Índice de Desarrollo<br />
Humano. De esta manera, las inequidades sociales<br />
en educación y salud representan un obstáculo de<br />
importancia para el logro de mayores niveles de<br />
desarrollo humano y de los Objetivos de Desarrollo<br />
del Milenio (ODM).<br />
3.2 La inequidad educativa<br />
Los avances experimentados por la educación<br />
hondureña en los últimos veinte años, así como<br />
la reciente aprobación de la Ley Fundamental de<br />
Educación en enero de 2012, que dota de una nueva<br />
estructura a la educación hondureña (ver cuadro<br />
3.1.), merecen reconocimiento. Sin embargo, el<br />
análisis realizado a continuación es crítico ante las<br />
inequidades que se han manifestado en el acceso<br />
a los servicios educativos y la permanencia del<br />
estudiantado en los mismos en las últimas décadas.<br />
Asimismo, la calidad de los aprendizajes, evaluados<br />
básicamente a través de las pruebas de logro<br />
educativo y de admisión que se aplican en el país,<br />
revela inequidades entre los servicios educativos<br />
brindados por el sector público y privado.<br />
Como ha observado el Banco Mundial, “los<br />
gobiernos están de acuerdo y han logrado que el<br />
acceso a educación primaria sea casi universal. Sin<br />
embargo, la calidad de la educación sigue siendo<br />
baja en América Latina, y existe una necesidad<br />
urgente de mejorar tanto la cobertura como la<br />
calidad de la educación secundaria, así como de<br />
crear los mecanismos para abrir el acceso a la educación<br />
superior a otros grupos aparte de aquellos<br />
con ingresos altos” (Banco Mundial, 2003).<br />
Teniendo en cuenta la importancia de la educación<br />
universal y de calidad para el desarrollo<br />
humano de Honduras, en esta sección se plantea<br />
un análisis que puede servir de referencia para el<br />
debate de lineamientos que contribuyan al diseño<br />
INFORME SOBRE DESARROLLO HUMANO HONDURAS 2011<br />
de políticas públicas, programas y proyectos, que<br />
fomenten la equidad en el sector de educación<br />
hondureño.<br />
3.2.1 Las brechas de inequidad en el acceso a la<br />
educación<br />
Un indicador clave para medir el acceso al<br />
sistema educativo escolarizado es la tasa neta de<br />
cobertura, la cual representa la relación entre los<br />
estudiantes matriculados en un nivel educativo<br />
que tienen la edad que corresponde oficialmente al<br />
nivel determinado y el total de la población en ese<br />
rango de edad, (UNESCO, 2006). El gráfico 3.1<br />
contiene la tasa neta de cobertura de la educación<br />
escolarizada en Honduras por grupo de edad para<br />
los años 2002 y 2010.<br />
La tasa neta de cobertura de la educación preescolar<br />
en la edad de 5 a 6 años tuvo entre los años<br />
de 2002 y 2010 un incremento de 13.2 puntos<br />
porcentuales. El incremento de la cobertura de<br />
la educación preescolar no se debe a acciones recientes,<br />
sino que es el resultado de una estrategia<br />
sostenida de corto y mediano plazo, orientada a<br />
incrementar la oferta en este nivel educativo a<br />
través de formas flexibles y no convencionales.<br />
Desde 1979, cuando se crearon los Centros<br />
de Educación No Formal (CEPENF), el Estado<br />
hondureño ha venido aumentando la cobertura<br />
del nivel preescolar, primero a través de Centros<br />
Comunitarios para la Iniciación Escolar (CCIE) y<br />
posteriormente, a través de los Centros de Educación<br />
Pre-Básica (CEPREB). De esta manera, más<br />
familias pobres han tenido la posibilidad de que<br />
sus hijos e hijas tengan acceso a educación preescolar,<br />
aunque continúa existiendo un segmento<br />
significativo de la población que aún no logran<br />
asistir a estos centros.<br />
La educación preescolar es clave para asegurar el<br />
rendimiento escolar en la educación básica, debido<br />
a la importancia que concede a la enseñanza impartida<br />
a través de métodos de estimulación temprana.<br />
Es por eso que, en las últimas décadas, se le<br />
ha concedido gran relevancia a nivel mundial.<br />
La tasa neta de cobertura de los primeros dos<br />
ciclos de la educación básica, experimentó entre<br />
2002 y 2010 un incremento de 3.5 puntos porcentuales.<br />
Las cifras evidencian que Honduras<br />
tiene una cobertura neta relativamente alta en<br />
estos ciclos educativos, alcanzando casi el 94%.<br />
El 6% que hace falta para lograr la cobertura neta<br />
total es difícil de alcanzar, ya que cuando se llega<br />
a porcentajes superiores al 90%, como es el caso<br />
de Honduras, se requieren esfuerzos sostenidos y