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Proceso-2038
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INTERNACIONAL /TERRORISMO<br />
Husein aviones y probablemente pilotos<br />
para bombardear” a este último país.<br />
Pero el costo fue elevado: “Irán castigó<br />
a Francia”. Así, precisa, “hubo una toma<br />
de rehenes franceses en Líbano (1985), un<br />
atentado contra la presencia francesa en<br />
Beirut y el atentado de la calle de Rennes,<br />
en París (1986), ordenado por Irán”.<br />
Posteriormente “Francia apoyó el régimen<br />
militar argelino en su golpe de Estado”<br />
tras la victoria electoral del partido islamista<br />
en las elecciones de 1991.<br />
“Y ocurrió lo mismo con Ben Alí (presidente<br />
de Túnez durante 22 años consecutivos):<br />
recibió un apoyo incondicional de<br />
Francia contra el supuesto peligro islamista”,<br />
señala el especialista.<br />
Más recientemente “no ha entendido<br />
que en Turquía el partido AKP (del actual<br />
presidente islamista, Recep Tayyip Erdogan)<br />
contribuyó a mandar al ejército a sus<br />
cuarteles, un ejército que era visto como<br />
garante de la laicidad”. Más aún, París<br />
“despreció” la candidatura de Turquía para<br />
formar parte de la Unión Europea, a partir<br />
de lo cual Ankara inició “relaciones peligrosas<br />
con movimientos yihadistas”.<br />
Tratos mercantiles<br />
Bayart denuncia además las alianzas<br />
“por cuestiones mercantiles” que Francia<br />
estableció con las monarquías petroleras<br />
del Golfo Pérsico, como Qatar, los Emiratos<br />
Árabes Unidos y Arabia Saudita.<br />
Explica: “A partir de los setenta Francia<br />
enfrentó un grave problema de desequilibrio<br />
en su comercio exterior. Los choques<br />
petroleros (provocados por el aumento<br />
brutal del precio del barril de crudo en 1973<br />
y 1979) pusieron fin a la energía barata en<br />
la que se sentaron las bases del crecimiento<br />
económico francés y la reconstrucción<br />
después de la Segunda Guerra Mundial”.<br />
Los dirigentes políticos franceses de<br />
la época buscaron entonces firmar megacontratos<br />
de armamento con los países<br />
emergentes, entre ellos las monarquías<br />
petroleras del Golfo.<br />
“Desde el fin de los setenta hay acuerdos<br />
militares muy vinculantes con Qatar y<br />
los Emiratos Árabes Unidos, a cambio de<br />
la compra, por estos países, de material<br />
militar francés”, apunta. La contrapartida<br />
es que “en caso de que estos países entren<br />
en guerra, Francia será obligada a intervenir<br />
militarmente de su lado”.<br />
El actual gobierno francés de Francois<br />
Hollande dio continuidad a esta política. En<br />
abril pasado, Qatar compró 24 aviones de<br />
caza franceses de tipo Rafale por 6 mil 300<br />
millones de euros.<br />
El resultado de estas alianzas con las<br />
monarquías petroleras es que “Francia<br />
ya no tiene ninguna legitimidad para dar<br />
lecciones de democracia a Irán o Turquía,<br />
porque nunca dice nada de la lapidación en<br />
Arabia Saudita, por ejemplo”.<br />
Bayart recuerda que gracias al respaldo<br />
francés las monarquías petroleras inundaron<br />
a Medio Oriente de petrodólares para<br />
difundir su propaganda salafista (corriente<br />
radical del Islam). Ello ocurrió en un contexto<br />
de ajustes estructurales neoliberales y de<br />
desmantelamiento de la ayuda pública para<br />
el desarrollo.<br />
El resultado: se empobreció a la mayoría<br />
de la población musulmana, se debilitaron<br />
los Estados seculares en la región y se crearon<br />
las condiciones para que los servicios de<br />
salud y de educación quedaran en manos<br />
de organizaciones religiosas financiadas por<br />
los defensores del Islam radical.<br />
“En varios países del Sahel (zona al<br />
sur del Sáhara), Francia se asoció en los<br />
ochenta con el Fondo Monetario Internacional<br />
(FMI) y el Banco Mundial para acompañar<br />
los planes de ajustes estructurales”,<br />
explica Bayart durante la entrevista con<br />
Proceso.<br />
“Los occidentales favorecieron el desmantelamiento<br />
de los sistemas educativos<br />
y de salud públicos mientras que las petromonarquías<br />
que estaban desbordadas de<br />
dinero financiaron a ONG islamistas para<br />
desarrollar escuelas y hospitales”, detalla el<br />
experto, quien habla de la actual existencia<br />
de un islamo welfare (estado de bienestar<br />
islámico).<br />
En resumen, los errores de cálculo en<br />
Afganistán, Siria, Irán y Libia, así como<br />
el apoyo a regímenes autoritarios y las<br />
alianzas con países que indirectamente<br />
promueven una visión radical de la religión<br />
musulmana, contribuyeron a desestabilizar<br />
profundamente al mundo árabe. Y fue en<br />
medio de este caos político que se extendió<br />
la galaxia yihadista compuesta por<br />
grupos como Al Qaeda en el Magreb, Boko<br />
Haram en Nigeria y el más poderoso: el<br />
Estado Islámico en Irak y Siria.<br />
Hoy Francia recibe un “retorno del<br />
bumerang” que lanzó hace varios años y,<br />
según Bayart, en ello no sólo existe responsabilidad<br />
por parte de los presidentes<br />
franceses de la posguerra, sino también de<br />
los ciudadanos que los eligieron. <br />
da y que operaba gente de su confianza,<br />
explica al corresponsal el periodista belga<br />
François Reman.<br />
En su administración, Moureaux se enfocó<br />
en “pacificar” la comuna, que en los<br />
años ochenta enfrentó aumentos de criminalidad<br />
y violencia, refiere Reman. Las estadísticas<br />
de la policía belga indican que<br />
entre 2000 y 2011 disminuyeron los índices<br />
de delincuencia en la demarcación.<br />
Pero eso ocurrió a costa de “cerrar los<br />
ojos” al proceso de radicalización que afectaba<br />
a sectores de la población musulmana,<br />
opina el periodista. “La comunidad musulmana<br />
–dice– se encerró en sí misma; se<br />
empezaron a ver más mujeres con velo o<br />
incluso burka, y más mezquitas, algunas<br />
en la clandestinidad”.<br />
La actual alcaldesa del barrio, Françoise<br />
Schepmans, del Movimiento Reformador<br />
–partido de derecha al cual pertenece<br />
el primer ministro Charles Michel–, ha<br />
confesado públicamente estar “rebasada”<br />
por la situación y acusa a Moureaux<br />
Les Béguines. El bar de los hermanos Abdelsam<br />
Marco Appel<br />
2038 / 22 DE NOVIEMBRE DE 2015 59