10.09.2020 Views

El Evangelismo - Elena G. de White

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Un sentido de responsabilidad sagrada--Los jóvenes se están

levantando para entrar en la obra de Dios; algunos de ellos comprenden

apenas el carácter sagrado y la responsabilidad de la obra... Hablan de

insensateces y bromean con niñas, mientras casi diariamente oyen las

verdades más solemnes y conmovedoras.--Joyas de los Testimonios 1:400

(1875).

No actores sino maestros de la Palabra--Veo que en el ministerio

debe realizarse una gran reforma antes que éste se convierta en lo que Dios

desea. Cuando los ministros están en el púlpito no tienen licencia para

comportarse como actores teatrales, asumiendo actitudes y expresiones

calculadas para causar efecto. No ocupen el púlpito sagrado como actores

sino como maestros de verdades solemnes. Hay también ministros fanáticos,

quienes, al intentar predicar a Cristo, causan conmoción, gritan, dan saltos y

golpean el púlpito como si estos ejercicios físicos fueran de algún provecho.

Esas extravagancias no prestan fuerza a las verdades pronunciadas, sino por

el contrario desagradan a hombres y mujeres de juicio claro y de conceptos

elevados. Es el deber de los hombres que se dedican al ministerio dejar la

conducta áspera y ruidosa por lo menos fuera del púlpito.

Los gestos torpes y toscos no deben tolerarse en las profesiones

comunes de la vida; cuánto menos, entonces, debieran soportarse en la obra

más sagrada del ministerio evangélico. El ministro debiera cultivar la gracia,

la cortesía, y las maneras refinadas. Debiera andar con una tranquila

dignidad que esté de acuerdo con su elevada vocación. La solemnidad, cierta

autoridad piadosa, mezclada con humildad, es lo que debiera caracterizar el

comportamiento del que es un maestro de la verdad de Dios.

Los ministros no debieran hacer una práctica de la costumbre de relatar

anécdotas desde el púlpito, porque esto disminuye la fuerza y la solemnidad

625

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!