e - Fundació Uriach 1838
e - Fundació Uriach 1838
e - Fundació Uriach 1838
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
- Sí . \lucilos historiadores . además.<br />
han sido coleccionistas d e<br />
medallas, de estatuas, de pintura<br />
. . . \Igunos. sobre todo del \rte .<br />
se han convertido en directore s<br />
de pinacotecas .<br />
En el caso de uno -quien esto es -<br />
cribe-. el padre de su maestro, Rafael<br />
Folch . inició una colección d e<br />
objetos de farmacia que dio luga r<br />
al Museo de la Farmacia Hispana .<br />
Su hijo, Guillermo Folch, fue su primer<br />
director, y yo el segundo .<br />
Uno atesora libros de I Iistoria d e<br />
la Farmacia, (le la Ciencia y (le 1 lis -<br />
[orla General (muchos), de Literatura<br />
y Filosofía (bastantes) y.<br />
como no tiene botica abierta a l<br />
público, objetos antiguos de s u<br />
profesión de boticario . Son cosas<br />
sin importancia . objetos banales .<br />
bagatelas . Las colecciones magníficas<br />
las hacen los poderosos ,<br />
los reyes, los financieros, los Estados<br />
. . ., aquellos que tienen lo s<br />
medios económicos necesario s<br />
para atender copiosos gastos .<br />
A menudo. desconocen inclus o<br />
los fundamentos del arte, del pensamiento<br />
o de la ciencia, pero tienen<br />
los posibles necesarios par a<br />
afrontar el reto . Quienes sabe -<br />
mos, solemos no tener y nos ve -<br />
nos obligarlos a rebuscar entre l a<br />
quincalla de almonedas y rastrillos<br />
. con la esperanza (le encontrar<br />
alguna vez una pepita de oro .<br />
- Los coleccionistas suelen se r<br />
tipos raros, extravagantes, excéntricos,<br />
obsesionados por cuestiones<br />
ajenas a los intereses del común<br />
de los mortales .<br />
- 1sí es! Uno tiene la suerte de qu e<br />
en su afición le acompañe su esposa,<br />
por eso la colección que va a<br />
utilizar de base para este libro e s<br />
de Begoña García y de quien est o<br />
escribe. l no tiene también la suerte<br />
de ser catedrático de universida d<br />
y de poder transmitir algunas de su s<br />
extravagancias a sus discípulos . Po r<br />
ejemplo, el amor a la conservació n<br />
del pasado. también el amor haci a<br />
su profesión, lo que, en vista de lo s<br />
muchos años que lleva profesand o<br />
y de las piezas que encuentra en la s<br />
públicas almonedas, no debe con -<br />
seguir con demasiado éxito . tino .<br />
también, está empeñado en afirma r<br />
que la de la farmacia es una profesión<br />
esencialmente humanística, e n<br />
el sentido dado por Terencio al término.<br />
según el cual todo lo human o<br />
le interesa .<br />
El farmacéutico . en su ejercici o<br />
profesional, no puede ser sólo u n<br />
técnico, ni sólo un científico : también<br />
es un humanista, dado que e l<br />
objetivo último de su actividad e s<br />
el mantenimiento o la reparació n<br />
de la salud de los vivientes, esencialmente<br />
seres humanos, per o<br />
también animales o plantas . Es<br />
este afán el que le sitúa en conexión<br />
10<br />
con los demás seres humanos, y<br />
así transcurre una vida común co n<br />
sus pacientes, marcada por afane s<br />
de muy diversa índole . aunque en -<br />
cuadrada en la realidad inevitable<br />
de la enfermedad y de la muerte .<br />
- Bien empezamos . . . Hablando<br />
(le muerte .<br />
- Quien olvida su condición mortal<br />
se convierte en un auténtico raro .<br />
en un ser verdaderamente ajeno a<br />
los humanos. Los megalómanos . lo s<br />
visionarios, los fanáticos . ignoran la<br />
fugacidad del ser vivo . la necesida d<br />
de ayudarle a bien vivir y. mucha s<br />
v('ces, nos dejan sin esperanza .<br />
Para cualquier empresa, materia l<br />
o espiritual, se ha de tener en cuent a<br />
la humana condición, marcada por<br />
las constantes de la enfermedad y<br />
de la muerte. Los sanitarios. N co n<br />
ellos los farmacéuticos . se han d e<br />
afanar en hacer más vivible la materialidad<br />
a los seres vivos. para qu e<br />
ellos puedan dotar a su existenci a<br />
de los contenidos que considere n<br />
oportunos . Los sanitarios, y co n<br />
ellos los farmacéuticos . tienen un a<br />
doble misión, la de vivir su propi a<br />
experiencia material, en lo que so n<br />
y se manifiestan como uno más, y<br />
la de ayudar a que sus próximos l a<br />
vivan con decore) y comodidad . debiéndose<br />
mostrar . en este aspect o<br />
profesional . absolutamente neutra -<br />
les respecto a la peripecia vital d e<br />
sus pacientes . Por eso, personal ,