e - Fundació Uriach 1838

Cr•rro-Irrl .I,ut pr r
pido «de primer orden» . en todo s
los casos en que se necesitas e
sobrealimentación : escrofulismo ,
anemia . fiebres tifoideas . . .
llay quien dice que la Farmaci a
no tiene nada que ver con la cocina
: se equivocan . En el siglo
\III . las conservas las prepara -
ban los boticarios . El vino . e l
aguardiente, los vinos quinados ,
como veremos, se dispensaban e n
las boticas hasta fechas recien -
Carlrl mcdi .ulrl para anunciar vi Cal/ir/da Lluc h
tes. El Colegio de Boticarios d e
Madrid, junto con el privilegio d e
la preparación de la 'triaca Mag -
na. tuvo el del aguardiente v, a
principios (lel siglo '\, aquel boticario
valenciano se volvió a me -
ter en la cocina. preparó un jarabe
al estilo islámico, mezcland o
lo salado y lo dulce o, si se prefiere,
al estilo de Felipe H . a quien
le encantaba un jarabe hecho co n
carne de caza . y se puso a alimentar
a trn pueblo que se moría
90
literalmente de hambre . Todavía
bien avanzada la posguerra . recuerdo
en mi pueblo burgalés a
algunos niños enfermos de raquitismo
. igualitos a esos que ho y
vemos en la televisión . retratado s
en el \frica negra . Los mirábamos
con asombro, con una ciert a
prevención, en nuestra ignoran -
cia . como si su desgracia se debiera
a alguna falta, a la ausencia
de conocimientos de su s
padres y no al hambre . a la total