A. Producción ovina - Repositorio Digital Redagrochile
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<strong>Producción</strong> <strong>ovina</strong>: desde el suelo a la gestión Manuales FIA de aPOYO a la FORMaCIÓn de ReCuRsOs HuManOs PaRa la InnOVaCIÓn aGRaRIa<br />
ción debe ponerse en el nivel y la fuente de proteína<br />
si se suplementa en la lactancia inicial. la cuantía de<br />
pérdidas de reservas corporales en lactancia inicial<br />
está afectada no sólo por la ingesta de nutrientes<br />
sino además por el nivel de las reservas corporales.<br />
Ovejas delgadas con pocas reservas movilizan menos<br />
energía y producen menos leche que ovejas gordas<br />
sometidas el mismo nivel de subnutrición.<br />
la Figura 3, de Robinson (1990), muestra la respuesta<br />
de producción en ovejas de 70 kg con 5,10,15 o<br />
20 kg de grasa corporal, equivalente a puntajes de<br />
condición corporal entre 1.0-3.5, a consumos de 20,<br />
25 y 30 MJ EM por día. En la ingesta mayor, los requerimientos<br />
de energía fueron cubiertos y los 4 grupos<br />
de ovejas produjeron 3,5 kg de leche diarios, casi<br />
manteniendo el peso vivo (20 g día-1 de pérdida).<br />
<strong>Producción</strong> de leche (kg día -1 )<br />
Con ingestas menores, la producción se redujo en<br />
mayor manera en ovejas con menores reservas corporales<br />
dado que las ovejas con mayores reservas<br />
movilizaron más grasa y produjeron más leche. aunque<br />
no fueron capaces de compensar totalmente la<br />
reducción de la ingesta de energía. Ovejas con 20 kg<br />
de reservas grasas y consumos diarios de 20 y 25 MJ<br />
EM, produjeron 2.9 y 3.0 kg de leche diarios y perdieron<br />
360 y 190 g de peso vivo diarios respectivamente.<br />
Con ingestas similares, las ovejas más flacas,<br />
con 5 kg de grasa corporal produjeron 2.1 y 2.8 kg<br />
diarios de leche y perdieron 105 y 60 g peso vivo,<br />
respectivamente.<br />
48<br />
fiG u r A 3. <strong>Producción</strong> de leche, ingestión de<br />
çenergía metabolizable y niveles de grasa<br />
corporal en ovejas de 70 kg de peso vivo<br />
35<br />
30<br />
25<br />
20<br />
15<br />
10<br />
5<br />
0<br />
5<br />
nivel de grasa corporal (kg)<br />
10 15 20 5 10 15 20 5 10 15 20<br />
25 30<br />
Ingestión energía metabolizable (MJ día-1 20<br />
)<br />
Composición de la dieta<br />
Relación concentrado: forraje<br />
una baja proporción de forrajes largos en la dieta de<br />
ovejas lactantes reduce el contenido de grasa en la<br />
leche. Este bajo nivel es relativamente frecuente en<br />
sistemas intensivos lecheros ovinos en países Mediterráneos<br />
donde los forrajes son caros y es rentable<br />
alimentar con elevados tenores de concentrados. Ello<br />
puede ser solucionado, por lo menos parcialmente,<br />
añadiendo tampones a dietas mayoritariamente con<br />
concentrados, para corregir el pH ruminal.<br />
Fuentes proteicas y de proteínas protegidas<br />
En general, suplementos en las dietas de ovejas lactantes<br />
con proteínas de baja degradabilidad ruminal<br />
han dado resultados muy variables. las respuestas<br />
positivas son más frecuentes en lactancia inicial,<br />
cuando el consumo voluntario es menor y las ovejas<br />
están en balance energético negativo. Robinson<br />
(1983) mostró que la respuesta de producción láctea<br />
a suplementos de una ración basada en heno y<br />
cebada con aproximadamente 70 g de proteínas de<br />
varias fuentes estaban en general relacionadas con<br />
la degradabilidad ruminal de ella. urea fuente de<br />
nitrógeno no protéico, que es completamente degradada<br />
en el rumen tuvo un efecto muy menor en<br />
producción de leche. aquellas fuentes de proteínas<br />
menos degradables en el rumen, harina de sangre, de<br />
pescado, afrecho de linaza tuvieron respuestas positivas<br />
de producción de 30%, mientras que las fuentes<br />
más degradables como harina de soya resultaron con<br />
impactos positivos de 12%. luego del brote de EEB<br />
(Encefalitis Espongiforme B<strong>ovina</strong>) en Europa, fuentes<br />
de proteína de origen animal no están permitidas en<br />
alimentos para rumiantes en muchos países. Dove<br />
et al (1985) encontró que suplementando ovejas<br />
en praderas de baja disponibilidad, con una fuente<br />
energética y harina de soya tratada con formaldehído<br />
(fuente de proteína protegida), incrementó la<br />
producción láctea en 33%.