SOLIDO LIQUIDO O GAS? - Instituto Cuánto
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la violencia que desanima al inversionista extranjero, y por el dólar barato<br />
que obliga al cierre de muchas exportaciones no tradicionales. Con cada día<br />
que avanza este proceso, la recuperación eventual será más larga.<br />
La cuenta capital de la balanza de pagos –los dólares que entran y<br />
salen por conceptos de préstamos e inversiones– es un cuarto elemento de<br />
anormalidad. El flujo de capital, constituido por las inversiones directas<br />
extranjeras y por los préstamos a largo plazo, se encuentra anulado como<br />
fuente importante de divisas, por el peso de nuestra enorme deuda externa.<br />
La reinserción no significará un aumento importante en el flujo neto de<br />
divisas, al menos por varios años, ya que los nuevos préstamos se posibilitan<br />
solamente mediante un pago mayor, y sin interrupción, del servicio de<br />
la deuda anterior. Y, de la misma forma, las inversiones petroleras y en gas<br />
implicarán egresos muy altos en los primeros años por la amortización de<br />
las inversiones.<br />
Tampoco es normal que entren cientos de millones de capitales de<br />
corto plazo en un año, como viene sucediendo. No es que, necesariamente,<br />
tiene que desaparecer ese flujo positivo. Pero la historia dice que estos capitales<br />
son de poco confiar y que sería de esperar que su volumen decrezca, si<br />
es que no se vuelve negativo.<br />
El dólar barato está creando un sentido falso de seguridad. La imaginación<br />
empieza a rechazar la posibilidad de un regreso a lo que era normal<br />
-un dólar de 2 o 3 soles (a los precios de hoy). Algunos se perjudican con el<br />
tipo de cambio tan bajo, pero la mayoría aprende a gozar de los viajes baratos<br />
a Miami, de los artefactos y carros importados, del aumento de los valores<br />
inmobiliarios y de la bolsa, y del alivio financiero que representan los<br />
créditos en dólares. Y muchas empresas pierden el temor a la fijación de sus<br />
precios en dólares, creyendo que el tipo de cambio actual no variará de<br />
manera significativa.<br />
La memoria colectiva se vuelve más y más corta. Ya muchos olvidan<br />
que seguimos viviendo en San Francisco.<br />
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Newsletter de Good Year, diciembre de 1991