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mi reino se extendera

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plan, y después de revisar estos estudios,<br />

es el <strong>se</strong>nti<strong>mi</strong>ento de la Primera<br />

Presidencia y del Con<strong>se</strong>jo de los<br />

Doce, que debería haber en el pre<strong>se</strong>nte<br />

más coordinación y correlación<br />

entre las actividades y programas<br />

de los varios quórumes del<br />

sacerdocio y las organizaciones<br />

auxiliares y el sistema educativo de<br />

la Iglesia. Por tanto han decidido que<br />

<strong>se</strong> debe establecer un con<strong>se</strong>jo encargado<br />

de la coordinación en toda<br />

la Iglesia y tres co<strong>mi</strong>tés encargados<br />

de la coordinación; uno para los<br />

niños, otro para los jóvenes y un tercero<br />

para los adultos. Este con<strong>se</strong>jo<br />

y los tres co<strong>mi</strong>tés correlacionarán y<br />

coordinarán los programas de actividades<br />

e instructivos de todas las<br />

auxiliares y quórumes del sacerdocio,<br />

los cuales <strong>se</strong>gún lo han sugerido los<br />

hermanos, deberán incluir instrucciones<br />

<strong>mi</strong>sionales y actividades para<br />

toda la Iglesia....<br />

La función del con<strong>se</strong>jo de coordinación<br />

es formular una política que<br />

gobierne la planeación, escritura,<br />

coordinación e implantación de todo<br />

el plan de estudios de la Iglesia<br />

Con la adopción de tal programa,<br />

podemos esperar la consolidación<br />

y simplificación del plan de estudios<br />

de la Iglesia, de las publicaciones de<br />

la Iglesia, de las construcciones,<br />

reuniones, y otros aspectos importantes<br />

de la obra del Señor.<br />

Después de esta breve declaración<br />

per<strong>mi</strong>tidme concluir con un pensa<strong>mi</strong>ento<br />

más. Quizás una de las preguntas<br />

formuladas con más frecuencia<br />

dentro de la Iglesia es, ¿"Cómo<br />

podemos esperar que las Autoridades<br />

Generales actuales supervi<strong>se</strong>n y<br />

<strong>se</strong> mantengan en contacto con toda<br />

la Iglesia, con el creci<strong>mi</strong>ento y tamaño<br />

que ha alcanzado?" Mi respuesta<br />

siempre ha sido: "Estoy <strong>se</strong>guro que<br />

para cuando lleguemos a un lugar<br />

donde necesitemos más revelaciones,<br />

el Señor nos dará esa luz y<br />

conoci<strong>mi</strong>ento por medio del profeta<br />

a quien ha escogido con e<strong>se</strong> propósito.".<br />

..<br />

Casi imperceptiblemente vemos mover<strong>se</strong><br />

la mano del Señor para realizar<br />

sus obras, y esto yo lo interpreto<br />

como la consolidación de las fuerzas<br />

del Señor bajo la dirección del Profeta.<br />

De la <strong>mi</strong>sma manera que en el<br />

ejército, para poder enfrentarnos al<br />

CAPITULO 17<br />

ejército del ene<strong>mi</strong>go, superior en<br />

números al nuestro, debemos consolidar<br />

nuestras fuerzas de oposición<br />

para dar la defensa más efectiva<br />

posible ante las fuerzas del mal.<br />

Estamos en un programa de defensa.<br />

La Iglesia de Jesucristo fue establecida<br />

sobre la tierra en estos días<br />

".. .por defensa y por refugio de la<br />

tempestad y de la ira, cuando <strong>se</strong>a derramada<br />

sin compasión sobre la<br />

tierra." (D. y C. 115:6)<br />

Este es un movi<strong>mi</strong>ento, que como<br />

dije, ha permanecido en la mente del<br />

presidente McKay y ahora como<br />

Presidente de la Iglesia nos ha instruido<br />

que vayamos adelante, que<br />

nos consolidemos para hacer más<br />

eficaz y efectiva la obra del sacerdocio,<br />

las auxiliares y las otras unidades,<br />

para que podamos con<strong>se</strong>rvar<br />

nuestro tiempo, energía y esfuerzos<br />

hacia el propósito principal por<br />

el cual la Iglesia ha sido organizada.<br />

No debemos olvidar lo que el Señor<br />

dijo, que él había dado una parábola<br />

para darnos una gran lección, y concluyó<br />

la parábola diciendo, "Yo os<br />

digo: Sed uno; y si no sois uno, no<br />

sois míos" (D. y C 38:27). (Conference<br />

Report, oct. de 1961, págs.<br />

77-81)<br />

Así que los programas de la Iglesia <strong>se</strong><br />

iban a correlacionar por medio del sacerdocio<br />

para fortalecer la fa<strong>mi</strong>lia y el<br />

individuo.<br />

El desarrollo de la<br />

correlación del sacerdocio<br />

El primer paso en la implantación de<br />

los principios de la correlación del<br />

sacerdocio fue el estableci<strong>mi</strong>ento de<br />

una organización general de la Iglesia.<br />

El con<strong>se</strong>jo de coordinación y los co<strong>mi</strong>tés<br />

de grupo por edades iban a planear<br />

y escribir las lecciones para la Iglesia<br />

bajo la dirección de la Primera Presidencia<br />

y de los Doce. Para 1962 dichos<br />

co<strong>mi</strong>tés habían hecho un bosquejo de<br />

un plan de estudios comprensivo el<br />

cual pronto <strong>se</strong>ría el medio de en<strong>se</strong>ñar<br />

el evangelio a los <strong>mi</strong>embros de la<br />

Iglesia agrupados en tres categorías:<br />

niños, jóvenes y adultos. Por ejemplo,<br />

los adultos Santos de los Últimos Días<br />

están ahora realizando un estudio profundo<br />

de los libros canónicos de acuerdo<br />

con un plan que <strong>se</strong> repite cada ocho<br />

años.<br />

En 1963 <strong>se</strong> añadieron cuatro co<strong>mi</strong>tés<br />

119<br />

bibliotecasud.blogspot.com<br />

del sacerdocio a las organizaciones de<br />

la Iglesia para coordinar mejor la dirección<br />

dada a las actividades de los maestros<br />

orientadores, <strong>mi</strong>sionales, de genealogía<br />

y de bienestar.<br />

La organización de correlación <strong>se</strong> extendió<br />

a nivel local en 1964 con la organización<br />

de con<strong>se</strong>jos de correlación de<br />

barrio y de co<strong>mi</strong>tés ejecutivos del sacerdocio.<br />

E<strong>se</strong> <strong>mi</strong>smo año la orientación fa<strong>mi</strong>liar<br />

consolidó los programas, antes<br />

<strong>se</strong>parados, para encontrar fa<strong>mi</strong>lias regularmente.<br />

El élder Lee explicó que "La<br />

orientación fa<strong>mi</strong>liar no es únicamente<br />

uno de los programas... la orientación<br />

fa<strong>mi</strong>liar es el instrumento por medio<br />

del cual vigilamos, mediante el sacerdocio,<br />

que cada programa de la Iglesia<br />

esté al alcance de los padres y sus hijos."<br />

{Manual de orientación fa<strong>mi</strong>liar del<br />

sacerdocio, 1967, pág. 1). De manera<br />

que todos los recursos de la Iglesia iban<br />

a estar a la dispocisión del individuo<br />

para ayudarle en sus esfuerzos de vivir<br />

el evangelio y por lo tanto prepararlo<br />

a alcanzar su potencial máximo como<br />

hijo o hija de Dios.<br />

La noche de hogar<br />

En 1964 la Iglesia dio nuevo énfasis a<br />

la realización de la noche de hogar<br />

regularmente, lo cual la Primera Presidencia<br />

había amonestado cincuenta<br />

años antes. Durante la conferencia<br />

general de octubre de 1964 el élder<br />

Harold B. Lee repitió las promesas<br />

hechas por los profetas anteriores a<br />

los padres que cumplen fielmente la<br />

responsabilidad de en<strong>se</strong>ñar a sus hijos.<br />

En todos estos estudios, de correlación<br />

del plan de estudios, nunca<br />

hemos olvidado las responsabilides<br />

que el Señor ha puesto sobre los<br />

padres en cuanto a la en<strong>se</strong>ñanza de<br />

nuestros hijos en el hogar. Recordaréis<br />

que el Señor dijo:<br />

"Y además, si hubiere en Sión o en<br />

cualquiera de sus estacas organizadas,<br />

padres que tuvieren hijos, y no<br />

les en<strong>se</strong>ñaren a comprender la doctrina<br />

del arrepenti<strong>mi</strong>ento, de la fe en<br />

Cristo, el Hijo del Dios viviente, del<br />

bautismo y del don del Espíritu Santo<br />

por la imposición de manos, cuando<br />

éstos tuvieren ocho años de edad,<br />

el pecado recaerá sobre las cabezas<br />

de los padres" (D. y C. 68:25)<br />

Las instrucciones a las que he hecho<br />

referencia y de las que habló el<br />

Presidente McKay fueron dadas hace

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