06.07.2014 Views

ECUADOR - Flacso Andes

ECUADOR - Flacso Andes

ECUADOR - Flacso Andes

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

ANÁLISIS 235<br />

)-,.;fj_<br />

las naciones occidentales22. Es sintomático<br />

el hecho, empero, de que muchos<br />

de estos países estén gobernados por<br />

dictaduras o, por lo menos, por regímenes<br />

bastante autoritarios; la condenación<br />

de los derechos humanos en cuanto<br />

extraños a su propio patrimonio cultural<br />

ha sido y es una maniobra harto<br />

transparente para encubrir violaciones<br />

de los más elementales derechos ciudadanos,<br />

cometidas por agentes e instituciones<br />

de gobiernos, cuya legitimidad<br />

democrática es dudosa. La insistencia<br />

en que los derechos colectivos, avalados<br />

por las tradiciones nacionales, deberían<br />

tener prevalencia sobre los derechos<br />

individuales, constituye una clásica<br />

ideología, es decir un ensayo de justificar<br />

hechos y decursos evolutivos que<br />

serían condenables a la luz de la razón.<br />

Estos regímenes recurren ahora, en una<br />

curiosa unanimidad, al relativismo cultural<br />

para racionalizar prácticas muy<br />

convencionales de opresión, explotación<br />

y manipulación de sus súbditos. Este<br />

enfático rechazo a los principios éticos<br />

occidentales es tanto menos digno<br />

de fe cuanto los mismos regímenes se<br />

sirven a manos llenas de la tecnología<br />

occidental en los campos de las armas,<br />

las comunicaciones y la industrialización.<br />

Es importante indicar que la actual<br />

corriente fuertemente adversa a cual-<br />

quier universalismo parte de una equivocación<br />

básica: confundir universalidad<br />

con uniformidad o, más concretamente,<br />

la validez de principios de derecho<br />

general con un impulso de aplastar<br />

las diferencias sociales y culturales. Se<br />

requiere de un estatuto, aceptado generalmente,<br />

que garantice la coexistencia<br />

de lo diverso, precisamente porque las<br />

condiciones del surgimiento de regímenes,<br />

instituciones, normas y costumbres<br />

son contingentes y aleatorias23_ La legitimidad<br />

de los derechos humanos no está<br />

determinada por su lugar de origen ni<br />

limitada por la sociedad donde fueron<br />

enunciados por vez primera; estos derechos<br />

no impiden de ninguna manera<br />

que cada individuo despliegue su potencialidad<br />

de desarrollo y, sobre todo,<br />

sus peculiaridades y singularidades en<br />

el marco de culturas muy diversas entre<br />

sí. La razón de ello. reside en el hecho<br />

de que los derechos humanos no prescriben<br />

obligatoriamente cuál es el contenido<br />

específico de ese desarrollo potencial,<br />

ni cuál deberá ser la configuración<br />

definitiva de aquellas peculiaridades<br />

y ni siquiera cuál podría ser la definición<br />

substancial de una humanidad<br />

bien lograda. Los derechos humanos<br />

constituyen sólo la base (pero la base<br />

absolutamente indispensable) para que<br />

el Hombre pueda desenvolverse de<br />

acuerdo a sus propios · cánones: justa-<br />

22 Cf. Etienne-Richard Mbaya, Menschenrechte _ ein westlicher Exportschalger? (Los derechos<br />

humanos _ una canción occidental para fomentar las exportaciones?), en: UNIVER­<br />

SITAS (Stuttgart), vol. 49, N2 575 (= 5,1 mayo de 1994, pp. 423-433<br />

23 Otfried Hoffe, Sieben Thesen zur Anthropologie der Menschenrechte (Siete tesis sobre la<br />

antropología de los derechos humanos), en: Otfried Hoffe (comp.), Der Mensch_ ein politisches<br />

Tier? Essays zur politischen Anthropologie (El Hombre _ un animal político? Ensayos<br />

sobre antropología política), Stuttgart: Reclam 1992 . p. 192

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!