desarrollo
desarrollo
desarrollo
You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
Capítulo 4<br />
Informe Europeo sobre el Desarrollo de 2009<br />
directamente (como por ejemplo en el “Acuerdo de Inversión Agrícola Especial” celebrado en 2002 entre Siria y Sudán).<br />
Por otro lado, se encuentra el proveedor de la tierra, que puede ser un gobierno o, con menor frecuencia, un terrateniente<br />
privado.<br />
Esta aparente sencillez encierra una gran complejidad. Cada “acuerdo” puede comprender múltiples contratos e instrumentos<br />
legales: desde un acuerdo marco donde se señalen los aspectos clave del acuerdo global y el gobierno de destino de la inversión<br />
se comprometa a poner el terreno a disposición del inversor, hasta instrumentos más específicos (contractuales o de otro tipo)<br />
que transfieran de forma efectiva el terreno o subsecciones de este. La medida en que se negocian o estandarizan los acuerdos<br />
sobre la tierra varía de un país a otro y en las distintas fases de la negociación. Por lo general, los instrumentos para asignar<br />
terrenos suelen estar más estandarizados (como en el caso de los contratos de arrendamiento de la Oficina del Níger de Mali).<br />
Normalmente, en cada acuerdo intervienen numerosas partes en las distintas fases de preparación, negociación, contratación<br />
y ejecución del proyecto. En primer lugar, participan múltiples agencias dentro del gobierno de destino. Incluso en los países<br />
donde existe un punto de contacto centralizado (integrado) para posibles inversores, que suele ser una agencia de promoción<br />
de la inversión, esta normalmente no es la única que aborda todos los aspectos del acuerdo sobre la tierra.<br />
Los inversores privados cuentan con la ventaja de que pueden actuar como una única entidad legal con un conjunto de<br />
valores homogéneo. No obstante, esto también puede tener matices, ya que cabe la posibilidad de que sean entidades<br />
privadas quienes se encarguen de la aplicación de los acuerdos firmados entre gobiernos, bien desde el principio, bien como<br />
parte de medidas posteriores para ganar velocidad. Por ejemplo, el acuerdo entre Siria y Sudán permitía a Siria delegar la<br />
ejecución en el sector privado, siempre que para ello contara con el consentimiento del gobierno de Sudán.<br />
TRANSFERENCIA DE LOS DERECHOS SOBRE LA TIERRA Y PRESERVACIÓN DE LOS INTERESES LOCALES<br />
En África predomina el arrendamiento de terrenos frente a su adquisición. La duración de estos arrendamientos oscila entre<br />
plazos cortos y períodos de hasta 99 años. Los gobiernos de destino de la inversión suelen desempeñar un papel clave en<br />
la asignación de arrendamientos de terrenos, fundamentalmente porque son los propietarios legales de toda o la mayor<br />
parte de la tierra. Por lo tanto, el quid de la cuestión es la medida en que los gobiernos tienen en cuenta los intereses locales<br />
en la tierra, el agua y otros recursos naturales.<br />
Cabe la posibilidad de que los gobiernos de destino adquieran un compromiso contractual para suministrar el terreno antes<br />
de consultar con los usuarios locales del mismo. Además, la falta de transparencia, proceso de comprobación y balances en<br />
las negociaciones contractuales favorece la corrupción y la percepción de los beneficios por parte de la élite. En Mozambique<br />
y en otros países, la legislación nacional exige a los inversores que consulten a la población local antes de la asignación de<br />
terrenos. En Ghana, es habitual celebrar acuerdos con los dirigentes locales. Pero incluso en estos casos, las deficiencias en<br />
la aplicación de los requisitos legales y en la responsabilidad de los dirigentes locales constituyen un problema recurrente.<br />
La seguridad de los derechos sobre las tierras locales también es de vital importancia. Las legislaciones nacionales varían, pero<br />
sí son comunes algunas características que deterioran la posición de la población local. Entre estas se incluyen la inseguridad<br />
de los derechos de uso sobre las tierras públicas, la inaccesibilidad de los procedimientos de registro, la compensación<br />
únicamente por la pérdida de mejoras como los cultivos en lugar de la tierra, y las obsoletas tasas de compensación. En<br />
consecuencia, la población local puede salir perdiendo, e incluso los inversores que quieren llevar a cabo buenas prácticas<br />
sufren la falta de procedimientos y directrices gubernamentales claros.<br />
EL EQUILIBRIO ECONÓMICO DE LOS ACUERDOS SOBRE LA TIERRA<br />
Por lo general no existen tasas sobre la tierra y otras transferencias monetarias, o estas son muy reducidas como consecuencia<br />
del deseo de atraer la inversión, los bajos costes de oportunidad percibidos y la ausencia de mercados de la tierra consolidados.<br />
Esto por sí solo no hace que el acuerdo sea desequilibrado: los beneficios para los países de destino pueden incluir compromisos<br />
de los inversores con respecto a los niveles de inversión y el <strong>desarrollo</strong> de infraestructuras (como por ejemplo sistemas de riego).<br />
Dada la relevancia de los compromisos de inversión en el equilibrio económico de los acuerdos sobre la tierra, exigir su<br />
cumplimiento es de vital importancia. La asignación de terrenos públicos por lo general está sujeta al cumplimiento por<br />
parte del inversor de unos planes durante los primeros años del proyecto. Una vez transcurridos estos, se confirma la<br />
asignación. No obstante, los gobiernos africanos apenas aprovechan esta condición para exigir responsabilidades a los<br />
inversores, y los términos de los contratos no son suficientemente específicos como para exigir su cumplimiento. Además,<br />
las evaluaciones puntuales en una fase temprana de aplicación no permiten supervisar ni aprobar sus resultados de forma<br />
continuada a lo largo de toda la vida del proyecto.<br />
64