LiUSK

Tony Boza
to nos dice Néstor Kohan:
No se trata de aumentar el salario sino de abolir el sistema de
trabajo asalariado, presupuesto de la existencia misma del capital.
Esta es la razón por la cual Marx afirma que combatir al capital
implica, al mismo tiempo, tener la perspectiva estratégica de abolir
al mismo tiempo el trabajo asalariado (...) El capital no es una
cosa. Por el contrario, constituye una relación que se define por
contradicción con su otro polo: el trabajo asalariado. Si no hay
trabajo asalariado no hay capital y viceversa (en esta formulación
se parte de la forma más desarrollada de «capital», plenamente
desplegada en la historia de la sociedad capitalista y expuesta en
la lógica dialéctica en su grado más alto de abstracción (tal como
aparece en el comienzo del primer tomo de El Capital). 21
El problema no consiste en la creación de un plusvalor o excedente, en
todas las civilizaciones conocidas, producto de la división del trabajo, el
hombre y la mujer han generado excedentes, han creado plusvalor, así lo
expresa Ludovico Silva en el Anti-Manual:
Tal vez hubo siempre plusvalía, y tal vez habrá en cualquier sistema
imaginable; pero lo específico del capitalismo es que la plusvalía
funcione como el eje del sistema. Ello le da rango de categoría económica
central, y por ello los economistas burgueses han dedicado
toda su saña a la destrucción de la teoría de la plusvalía. 22
Lo importante es considerar la forma de apropiación y distribución de ese
excedente creado colectivamente. En el socialismo debe orientarse a satisfacer
las necesidades humanas y lograr la suprema felicidad social.
Lo dicho hasta aquí es lo que a grandes rasgos constituye la llamadada "ley
del valor" en el capitalismo, que tiene además la misión de enmascarar la
producción de plusvalía, que ya explicamos cómo funciona. Y queda claro
que los bienes son valores de uso en razón de su materialidad, y que producto
de la lógica mercantil-capitalista se transmutan en mercancía, es decir, en
valor de cambio.
21. Kohan. Néstor. Nuestro Marx. Libros de Rebelión. p. 314.
22. Silva, Ludovico. Anti-manual para uso de marxistas, marxólogos y marxianos. 3ª Edición.
Monte Ávila Editores. Caracas. 1978. p. 185
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