Nº - Legislatura de Río Negro

46/2
Dice el Ministro en su respuesta a nuestro pedido de informes: “Que al
tomar relevancia en los medios periodísticos tal cuestión, tomé como recaudo
mantener una reunión con el señor Berros y pedirle las explicaciones
correspondientes. Ante mi requerimiento el mencionado me transmitió que él
había tomado con asombro la información difundida y que ese día como cualquier
otro llegó al Ministerio y entre sus actividades de rutina inició sesión en su
computadora y comenzó, como es habitual, con diferentes reuniones en su oficina
y fuera de ella, dejando su sesión abierta; que él no había mandado el correo
electrónico mencionado y que desconocía quién pudo haberlo hecho, todo ello en
el marco de que sería arbitrario y vacío de contenido señalar a cualquiera de las
personas de la oficina como responsable del correo electrónico en cuestión,
cuando él carecía de pruebas para hacerlo”.
Señor presidente, esto es lo mismo que decir “el revolver era mío, lo
cargué yo, lo puse arriba del escritorio, pero no sé quién tiró el tiro”. No es un
debutante en complicar a empleados este joven, ya en el año 2005, hay un
expediente en el Concejo Deliberante de General Roca, cuando este joven fungía
como funcionario del entonces intendente Carlos Soria, que se aprobó un
reintegro por indigencia que le costó el empleo al asistente social que avaló este
trámite.