Machaira - Identidades

PREÁMBULOEn mi reencuentro con Cristo, busqué ayuda espiritual en líderes y pastores quedemostraron tener un conocimiento limitado de la Palabra de Dios. Tenía muchas preguntassin respuesta y mi espíritu se agitaba tras la búsqueda de la perfección que nos pide Cristo.Sentí una profunda necesidad de conocer el nuevo ámbito en el que me encontraba insertoy, tras el deseo de querer ser parte activa en todos sus procesos, busqué aprender porintermedio de literatura dispuesta para estos efectos en muchas librerías cristianas.Ávido de conocimiento de las leyes que condicionan y rigen este nuevo ámbito espiritual,consulté todos los libros de Peter Wagner y sus imitadores, en la creencia que estos autoresy sus conocimientos podrían ayudarme.Desde 1990 y por espacio de 10 años, me hice “experto” en todas las falsas doctrinas quepostulan estos individuos. Por la Gracia de Dios, pude darme cuenta en ese tiempo quenada de lo que yo practicaba (y aplicaba) tenía los resultados ampliamente detallados enesos libros mentirosos y espurios.La guerra espiritual en todos sus niveles (a nivel de piso, a nivel estratégico, a desnivel y asobre nivel...); la sangre de Cristo regada y esparcida a diestra y siniestra sobrepersonas, animales y objetos; las cadenas generacionales que transmiten la maldad sobre laspersonas hasta la tercera y cuarta generación; las distintas formas de atar y desatar a satanásy a las personas; el saqueo de la casa del hombre fuerte; las oraciones de intercesiónguerrera que hacen estragos en los encuentros bélicos en los niveles espirituales; lareprensión de demonios y de espíritus inmundos; la lucha contra la posesión demoníaca deobjetos y de lugares; la lucha contra Jezabel (la reina del cielo); la guerra contra losespíritus territoriales; los porteros espirituales; la ventana 10-40 y toda esa sarta deestupideces sobre el control que ejercen los espíritus territoriales sobre las comunidades (alextremo de que en un lado de la calle la gente es bondadosa y en el otro lado la gente esarisca, dependiendo del demonio que tenga el control del lado de la calle en el que teencuentres).Falsas “visiones” y oraciones de intercesión proféticas, llenas de misticismo y fanatismoreligioso; sanidades fraudulentas; falsos milagros; prodigios y supercherías que debíamosaceptar por fe ciega, a pesar de no haber visto nunca nada que se asemejara a lo descrito enla Biblia. La vida espiritual del genuino creyente, comienza cuando logra zafarse detodas esas prácticas y doctrinas paganas que en la actualidad están haciendo estragos enmiles de congregaciones alrededor del mundo.John F. Anderson H. μάχαιρα MACHAIRA 12 de 505