Una-teoria-sobre-la-vida

Una teoría sobre la vidaracciona con un observador, momento en el que se manifiesta en una desus infinitas posibilidades. Ello nos induce a pensar que la propia concienciadel observador puede tener la capacidad de modular la forma enla que se manifiesta esa realidad, o lo que es lo mismo, la manifestaciónde la realidad se encuentra influida por la conciencia del observador y,por tanto, por sus pensamientos y sus creencias.El siguiente concepto erróneo es el relativo al tiempo. Esa línea continuaque nos lleva inexorablemente del pasado hasta el futuro ni estan estable, ni es tan uniforme como creemos. La velocidad del objetoo su mayor o menor cercanía respecto a una gran masa (p.ej. un agujeronegro) son capaces de alterar el normal discurrir del tiempo. Y si eltiempo discurre de forma distinta dependiendo de nuestro movimientoo nuestra situación, es decir, de las características ligadas al observador,entonces la división entre pasado, presente y futuro adquiere un caráctersubjetivo. Esto nos lleva a pensar que es nuestra propia existencia la queotorga al tiempo sus características y movimiento propio, que es nuestraconciencia la que le da sentido y proporciona coherencia al Universo.En definitiva, la idea que se desprende de los principios científicos yque debemos tener presente en todo momento es que el Universo no esun lugar formado por objetos ajenos a nosotros que interaccionan entresí a través de la ley de causa-efecto y en el cual desarrollamos nuestrasactividades. En realidad, es un Universo cuya existencia y característicasestán ligadas a nuestra conciencia, la cual es un elemento fundamentalen el proceso de decantación de esa realidad. El suceso yel observador son las dos caras de una misma moneda, los elementosconstitutivos de un mismo proceso.Pero si la conciencia es un elemento tan importante a la hora demanifestarse la realidad y existen una infinidad de conciencias que coexistenen el Universo, ha de existir un nexo de unión que coordinetodas estas conciencias y otorgue coherencia a todas las manifestacionesde la realidad. Este nexo de unión debe ser, sin duda, la resonanciamórfica de Rupert Sheldrake y los campos morfogenéticos asociadosa dicho proceso.167