es estar así, ninguno de nuestra familia es así, tú eres la únicaque nos haces quedar mal a la familia. Eso lo hace sentir mal auno (varias entrevistadas).El desconocimiento de la familia es latente en sus expresiones:Tú sabías que existía tu madre pero no convivías con ella, ni contu padre, no tenías esa armonía, esa unidad que debe de existir enla familia, sino que era un alejamiento, casi no existía la familia...la familia era casi algo desconocido (Antonio).A pesar de que observamos que la familia está en crisis, sepuede decir que aún perdura un ideal de familia que –de algunamanera- se reproduce en la pandilla. Este tipo de agrupación actúacomo una comunidad de acogida, lo cual se refleja en el lenguajejuvenil que, entre pares, está cargado de expresiones como:"familia", "ñaño", "primo", "brother".Sin embargo, si bien los problemas familiares pueden ser vistos,en muchos casos, como antecedentes para la inserción en <strong>pandillas</strong>,otras causas intervienen en la decisión de pertenecer a unapandilla.Los padres no comprenden a los chicos, pero también los jóvenesquieren probarse, divertirse con su patín. O sea en cuestión familiaryo no tenía muchos relajos, el problema era que no tenía relajo,ni para bien ni para mal. Mi mamá se dedicaba a darme para elcolegio y hasta luego, harás deberes y nada más, yo no tenía problemas(entrevista de grupo).Otros relatos demuestran como la pandilla es el espacio paraexperimentar nuevas búsquedas: de emociones y de sentido personal.El descaletarse 54 , el salir de la casa, da cuenta de estas búsquedas,significa para ellos una etapa de vivencia propia:Cuando yo estuve en la Universidad, llegaba borracha a la casa yyo le dije así a mi esposo, te imaginas si no nos hubiésemos casadoyo estuviese estudiando, y seguiría siendo una borracha. Élme dice que yo hubiera estado con mis panas, chupando todos losviernes o fines de semana, porque tú me ayudaste a cambiar a míy yo a vos (Marcela).54 En su jerga, la caleta es la casa y por tanto, "descaletarse" sería irse de su casa.82 Mauro <strong>Cerbino</strong>
A veces nos descaletábamos, nos ibamos con los panas a vivir unbuen tiempo y después se regresaba de nuevo a la casa(Germán).Curiosamente, la mayoría de los pandilleros entrevistados consideraal matrimonio y a la constitución de una familia propiacomo una posibilidad para “cambiar de vida” y poder abandonar lapandilla.Ya viví la juventud y en mi etapa adulta me gustaría trabajar, ayudara mis padres, mantener a mi mujer, estudiar y trabajar...seralguien en la vida (Walter).No obstante, algunos pandilleros pese a tener hijos y convivircon ellos y con sus esposas no dejan la pandilla. Aunque en algunoscasos, como el de Beatriz, el hecho de tener un hijo, sí ha cambiadosu concepción de la vida y la familia:Mi hijo me ha enseñado bastante, a valorar la presencia de mis papásporque ahora yo también soy madre y sé lo que se siente tenerun hijo. ¡Todo el dolor que mis papás han de haber sentidocuando yo no llegaba a dormir! Yo nunca les respondí, pero yonunca aproveché las oportunidades que tuve. Pude estar en la casa,aunque sea viendo televisión con mis papás, pero preferí estaren otros lados. Mi hijo me ha ayudado a muchas cosas y a ser unapersona adulta...Pandillas Juveniles 83
- Page 3 and 4:
PANDILLAS JUVENILESCULTURA Y CONFLI
- Page 5 and 6:
RECONOCIMIENTOSEl presente ensayo f
- Page 7 and 8:
PRÓLOGOEn un mundo signado por exc
- Page 9:
ido, como medio de sobrevivencia, s
- Page 12 and 13:
La medida tomada en Guayaquil, del
- Page 14 and 15:
Es necesario renunciar a una concep
- Page 16 and 17:
mación identitarias. Estas manifes
- Page 18:
hacen conducta y esta es una violen
- Page 21 and 22:
ASPECTOS METODOLÓGICOSESCENAS, ESC
- Page 23 and 24:
tuaciones de desventaja y riesgo en
- Page 25 and 26:
Método de estudioEl paso siguiente
- Page 27 and 28:
tas, y guiar la entrevista hacia la
- Page 29 and 30:
LA MIRADA DE LOS MEDIOS YLA GENERAC
- Page 31: ...la tarde del primer viernes de e
- Page 34 and 35: tornos y escenas en las que los pan
- Page 36 and 37: so- juvenil, la representación de
- Page 38 and 39: cunscribible con claridad y no asoc
- Page 40 and 41: Otras veces, en cambio, la mirada p
- Page 42 and 43: utos estéticos 27 . Éstos afirman
- Page 44 and 45: o, articulado en las tradicionales
- Page 46 and 47: cia la demostración de valentía,
- Page 48 and 49: Un "aditivo" para sostenerse en el
- Page 50 and 51: En general, "caminar" por la ciudad
- Page 52 and 53: El componente de virilidad y el loo
- Page 54 and 55: En muchos de los relatos de los ent
- Page 56 and 57: Esta "otra" familia, la de la calle
- Page 58 and 59: que aqueja y alegra; las formas de
- Page 60 and 61: Con respecto al miedo, éste tiene
- Page 62 and 63: con la necesidad de respaldo social
- Page 64 and 65: ción corren los imaginarios de la
- Page 66 and 67: Sin embargo, detrás de estos discu
- Page 68 and 69: EMERGENTES PERO INVISIBLESQué les
- Page 70 and 71: Esta politización provocada desde
- Page 72 and 73: eligiosidad mucho más intimista y
- Page 74 and 75: ¿Por qué crees que teníamos arma
- Page 76 and 77: DE MIEDO, PODER Y ARMAS...Yo siento
- Page 78 and 79: La vida para mí... no sé...no ten
- Page 80 and 81: del suicidio (lo intentó en tres o
- Page 85 and 86: IDEAS PARA UNAPOLÍTICA DE JUVENTUD
- Page 87 and 88: Creemos que sí es posible, si se t
- Page 89 and 90: tentan las dinámicas de integraci
- Page 91: es necesario pensar hoy en día en
- Page 94 and 95: 4. La gestación de una cultura esc
- Page 96 and 97: con sida comiendo las papas fritas
- Page 98 and 99: PALABRAS QUE EN DIFERENTESCONTEXTOS
- Page 100 and 101: Camello: trabajo.Carcoso: algo infe
- Page 102 and 103: Hip hop: movimiento cultural creado
- Page 104 and 105: S abido(s): personas que conocen m
- Page 106 and 107: Cevallos, F. y C. Cevallos 1998.
- Page 108 and 109: Wittgenstein, Ludwig 1971. Ricerche
- Page 110: tornos sociales violentos: de la re