Abuso_sexual_infantil_digital uruguay
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
66<br />
<strong>Abuso</strong> <strong>sexual</strong> <strong>infantil</strong>. Cuestiones relevantes para su tratamiento en la justicia<br />
que el cerebro del niño, al igual que una computadora, es programado por<br />
el abusador al incorporarle un conjunto de datos codificados (los que hacen<br />
a la dinámica abusiva) para producir determinados comportamientos (el<br />
silencio, la sumisión, etc.). La programación limita las posibilidades de elección<br />
y el comportamiento de la víctima.<br />
* * *<br />
Finalmente, Roland Summit (1983) describió el síndrome de acomodación<br />
al abuso <strong>sexual</strong> <strong>infantil</strong> para explicar cómo y por qué el as puede ocurrir a<br />
lo largo de años, sin ser notado o percibido, y cómo y por qué las víctimas<br />
callan.<br />
Summit detalló una secuencia de comportamientos que suelen observarse<br />
en los niños víctimas de as (Summit, 1983; Intebi, 1998), algunos de los<br />
cuales ya han sido desarrollados en este capítulo, a saber:<br />
1. El secreto.<br />
2. La desprotección. Está dada por las estrategias de aislamiento mencionadas,<br />
en que el abusador <strong>sexual</strong> va minando los lazos de cercanía<br />
y confianza que el niño tiene o pueda desarrollar con otras posibles<br />
fuentes de ayuda; pero al mismo tiempo se ve reforzada por una serie<br />
de prácticas sociales habituales: el enseñar a los niños a desconfiar<br />
de los extraños los aleja también de la posibilidad de acudir al afuera<br />
como una fuente posible de protección y ayuda. A solas con el abusador,<br />
el niño queda claramente desprotegido. Secreto y desprotección<br />
son requisitos fundamentales para que el abuso ocurra.<br />
3. El atrapamiento y la acomodación. Se dan como consecuencia de la<br />
repetición crónica del abuso <strong>sexual</strong> <strong>infantil</strong>. El niño rápidamente entiende<br />
que no hay escapatoria real, física, a la situación del as, y que<br />
todo intento conlleva el peligro del cumplimiento de las amenazas<br />
del adulto que abusa de ella. Por otro lado, el abuso se da en la intimidad<br />
de su propio hogar, de su propia cama, con lo cual la escapatoria<br />
se ve aún más imposibilitada. Frente a estas evidencias, el niño<br />
comienza a acomodarse a la situación a través de diversas estrategias<br />
psicológicas (entre ellas, la disociación).<br />
4. El develamiento tardío, conflictivo y poco convincente. Es común<br />
que el as ocurra durante años, y la primera pregunta que salta en<br />
boca de los familiares (y muchas veces en boca de los agentes de la