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El arte de Francisco Salzillo Murcia, Francisco Salzillo y la Cofradía de Jesús<br />
perfecta sintonía con lo expuesto para las obras de imaginería,<br />
habrán de someterse a que “... su aprobación me dé la honrosa<br />
vanidad de haber acertado a servirle, que ha sido mi mayor<br />
deseo, sujetándome desde luego a quitar, añadir o variar lo<br />
que quisiere porque en todo anhelo a complacer gustoso y<br />
servir obediente a V. I...” 16<br />
servir obediente a V. I...” 16<br />
servir obediente a V. I...” .<br />
La creciente autoconciencia de los artistas sobre la índole<br />
espiritual de los resortes profundos de su trabajo llevó a aquellos<br />
que reflexionaron sobre los instantes del misterioso acto<br />
creador a tratar de desentrañar su naturaleza. Al tiempo que<br />
dilucidaba las enfadosas demandas de los comitentes, la imaginación<br />
del artista comparaba formas, intuía expresiones,<br />
calculaba efectos. Al reflexionar sobre la génesis de la creación<br />
acudía a la mente de los tratadistas una metáfora biológica, la<br />
existencia de una especie de “fecundación de la imaginación”<br />
de la que nacía la invención. Las estampas, junto a otros tipos<br />
de imágenes, constituyeron un factor decisivo a la hora de<br />
sopesar ideas compositivas y fórmulas iconográficas en el<br />
recóndito trajín de los talleres.<br />
Desde fecha muy antigua se planteó el problema de la<br />
identificación de las fuentes gráficas de la obra de Salzillo17 .<br />
La cuestión no ha perdido actualidad, pese a no ser muy convincentes<br />
las aproximaciones hasta el momento señaladas, y<br />
menos aún ha llegado a esbozarse una cierta interpretación de<br />
los criterios y preferencias del escultor a la hora de inspirarse<br />
en una imagen. Es evidente la enorme dificultad de llegar a<br />
conclusiones válidas por el ingente repertorio a explorar y el<br />
decisivo peso del azar en el hallazgo de paralelos y semejanzas.<br />
En todo caso, permanece como cuestión esencial en la<br />
investigación del aprovechamiento de estampas, obras de arte<br />
y, por supuesto, textos literarios como fuentes de inspiración,<br />
el valorar el grado de apropiación y asimilación que se advierte<br />
en la manera de extractar o desarrollar motivos tomados de<br />
imágenes y obras ajenas.<br />
En la obra, tan imprescindible como escasamente estudiada,<br />
de A. Palomino, el Museo Pictórico y Escala Óptica, se<br />
16 Memoria. Ibíd. Documento sin paginar.<br />
Nicolás de Bussy, Paso de los Labradores (La Diablesa) (III)<br />
17 Véanse García de Diego, E. 2005, pp. 78-81; Sánchez Moreno, J. 1983, pp.<br />
67-77. Belda Navarro, C. 1986, pp. 101-131.<br />
recogen precisas observaciones, hijas de su propia experiencia<br />
y de su amplísima erudición historiográfica sobre la formación<br />
de los artistas, las diversas disciplinas de su aprendizaje y los<br />
criterios sociológicos y estéticos que estimulaban la creación<br />
y orientaban la apreciación de las obras de arte 18 . Advirtamos,<br />
de inmediato, que la preferente dedicación de la citada obra a<br />
la pintura, dado el enfoque humanista y la excepcional cultura<br />
del autor, motiva la abundancia de valoraciones e información<br />
sobre escultura en el referido Tratado. Escribe el pintor<br />
cordobés de autores y problemas de finales del siglo XVII y el<br />
primer tercio del XVIII. Sobre la utilización de estampas por<br />
parte de los escultores ratifica observaciones ya consignadas<br />
por Pacheco, tratando de razonar una suerte de teoría sobre<br />
ventajas e inconvenientes que el generalizado uso de tales<br />
fuentes consultivas podía plantear para la sólida formación<br />
de los artistas. Son numerosos los pasajes de su obra donde<br />
se comentan con agudeza y profundo conocimiento de causa<br />
estas cuestiones. El tratadista advierte de las dificultades de<br />
la inspiración en estampas si no se rebasa el mero recurso<br />
18 Vid. supra Palomino, A. 1947.<br />
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